Teletrabajo - Alhambra IT
LOGROÑO, 23 Mar. (EUROPA PRESS) -
Negar el cambio resulta imposible. Nuestras vidas han cambiado radicalmente en unos días y en casi todos los ámbitos. La forma de relacionarnos, de comunicarnos y, en definitiva, de afrontar el día a día ha sufrido un revés a causa de una de las mayores crisis sanitarias que se recuerdan. Y estos cambios también se han impuesto en nuestra vida laboral. El teletrabajo ha llegado "de golpe" pero "para quedarse" y para su correcto funcionamiento: "la confianza entre trabajador y empresario será fundamental".
Así lo considera el experto de la UNIR, Guillermo García, quien ha explicado a Europa Press que el teletrabajo supondrá "un cambio de mentalidad" para todos que será "positivo" siempre y cuando "sepamos adaptarnos a ello".
Ante aquellas voces que discrepan de las cualidades de su implantación, el también profesor del Grado de Derecho de UNIR y experto en Relaciones Laborales tiene claro que "el teletrabajo tiene la misma eficacia que el método tradicional". Eso sí, es una modalidad que exige mucha disciplina, seriedad y rigurosidad pero puede ser igual de efectivo que si se trabaja desde una oficina siempre y cuando "se haga bien".
Además, para evitar "contratiempos" o "problemas en la salud" el experto aboga por implantar unas rutinas y horarios "marcados" a la hora de teletrabajar "para evitar caer en el tecnoestrés o en la hiperconectividad".
A ello, añade, "la situación en la que nos encontramos ahora de confinamiento no es la real para un teletrabajo, en estos momentos nos estamos adaptando a una circunstancia excepcional, pero aunque se pueda asemejar, la realidad de este tipo de trabajo no es esta situación. Cuando todo pase veremos cómo es realmente".
MAYOR FLEXIBILIZACIÓN
Para el experto, el teletrabajo "tiene cosas muy positivas" porque, a grandes rasgos, nos permite una mayor flexibilización y una mejor organización eso sí "siempre que un trabajador tenga unas pautas o una buena gestión del tiempo". Por ello, es fundamental "que las empresas formen a sus trabajadores en esta gestión para evitar situaciones de estrés".
En estos momentos, aclara, "es imposible" porque la situación nos ha llegado de golpe, "pero cuando todo esto amaine, será necesario que los empresarios formen a sus trabajadores porque el teletrabajo llega para quedarse".
DE LAS CRISIS SURGEN "NUEVAS OPORTUNIDADES"
Con todo ello, el profesor de la UNIR ha afirmado que "de las crisis siempre nacen nuevas oportunidades" y el teletrabajo puede ser una de ellas porque "es cierto que en España teníamos cierta reticencia en este tipo de trabajo y estábamos retrasados con respecto a otros países porque nos parecía muy difícil adaptarnos a ello".
"A día de hoy y, ante semejantes circunstancias, hemos visto claro que, en muchos casos, se puede hacer y el trabajo sigue saliendo", ha afirmado.
Además, a modo de reflexión, García explica que, en estos momentos en los que nos estamos obligando a trabajar de esta manera, "debemos ser conscientes de las posibilidades que nos otorga el trabajo. Está claro que el teletrabajo no es la panacea pero es un instrumento muy bueno también para conciliar, si se sabe hacer bien".
"Dentro de lo que cabe -continúa- tenemos que ser disciplinados y estructurar nuestro trabajo separando claramente nuestro momento familiar o de descanso del trabajo en sí".
También será necesario una buena adaptación de recursos tecnológicos y analizar siempre "caso por caso" porque, como es bien sabido, "hay muchas profesiones en las que no se puede realizar el teletrabajo".
AYUDA DE LAS ADMINISTRACIONES
Además, las empresas deben saber que "el teletrabajo es una opción legal posible y desde las administraciones se deben ayudar a pymes y micropymes a adaptarse a la nueva situación".
En este sentido, insiste, "estas pequeñas empresas deben obtener un soporte desde las administraciones para contar con un servicio más personalizado o con un teléfono a quien consultar las dudas que puedan surgir desde la perspectiva jurídica, conocer ayudas, fondos o créditos de financiación para que las empresas puedan adquirir bienes para fomentar el teletrabajo".
Finalmente el experto también tiene claro que habrá que concretar "mucho mejor" los aspectos legales y de privacidad de este tipo de trabajos. "Tenemos por delante un reto muy importante en este sentido para garantizar los derechos fundamentales de cada trabajador. De momento el reglamento es escaso y será necesaria una adaptación de la normativa de protección de datos para evitar abusos tanto del empresario como del trabajador".