Finaliza la excavación arqueológica en el yacimiento de 'La Magdalena' de Grañón

Excavación arqueológica en el yacimiento de 'La Magdalena' de Grañón
Excavación arqueológica en el yacimiento de 'La Magdalena' de Grañón - DELEGACIÓN DEL GOBIERNO EN LA RIOJA
Publicado: lunes, 24 agosto 2020 19:41

   LOGROÑO, 24 Ago. (EUROPA PRESS) -

   El Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, en el marco

   de la ejecución de las obras de la 'Autovía A-12, Camino de Santiago.

   Tramo: Santo Domingo de la Calzada-Villamayor del Río', ha

   finalizado los trabajos de excavación arqueológica en área en el

   yacimiento de La Magdalena, en el municipio de Grañón.

   El enclave se conoció gracias a los estudios previos realizados durante la redacción del proyecto constructivo de la autovía, momento en el que se abordó una campaña de sondeos arqueológicos previos que permitieron delimitar con cierta fiabilidad el enclave arqueológico y sus características, incluyendo un programa de intervención en extensión, previa al inicio de las obras en este punto, localizado entre los puntos kilométricos 4,9 y 5,06.

   La UTE AUTOVÍA A-12, formada por las empresas Ortiz

   Construcciones y Proyectos, S.A., Torrescámara Compañía de

   Obras, S.A., y Levantina Ingeniería y Construcción, adjudicataria de

   los trabajos por parte del Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda

   Urbana, contrató para la realización de los trabajos arqueológicos a la

   empresa ANTEQUEM, Arqueología y Medio Ambiente, S.L. Esta

   empresa redactó el correspondiente proyecto de actuación, solicitando

   permiso de excavación arqueológica a la Dirección General de Cultura

   del Gobierno de La Rioja. El permiso fue concedido el pasado 20 de

   mayo de 2020.

CARACTERÍSTICAS TÉCNICAS

   La actuación se ha realizado durante el último mes y medio y se ha

   desarrollado en una superficie de 1.985 metros. Las tareas de excavación

   manual han permitido reconocer y documentar de forma exhaustiva

   117 contextos arqueológicos pertenecientes a un yacimiento de

   cronologías tardoantigua y altomedieval.

   De ellos, 108 son tumbas de inhumación perteneciente a una necrópolis altomedieval, consepulturas excavadas en la arcilla geológica en forma de fosas simples o, en algunos casos, antropomorfa, es decir marcando los hombros. Aproximadamente la mitad de las tumbas presentan cubierta de lajas de piedra -de caliza, arenisca o esquisto-, en algún caso monolíticas, mientras que en el resto se cubrió el cadáver directamente con tierra.

   Todos los cuerpos estaban colocados en decúbito supino, a excepción

   de algunos neonatos colocados en posición fetal. En la posición de los

   brazos es donde se observan leves variaciones, ya que podían estar a

   lo largo del cuerpo o flexionados en diversos ángulos, con las manos

   sobre el abdomen, el pecho, las clavículas o el pubis, y en muchos

   casos cada brazo estaba en una posición diferente, es decir de manera

   asimétrica.

   Lo que sí parece claro es que estaban envueltos en

   sudarios, pues, aunque no se ha conservado ningún resto textil, los

   esqueletos muestran un recogimiento que sólo sería posible si estaban

   envueltos en una tela que contuvo los miembros durante los procesos

   postdeposicionales relacionados con la pudrición del cadáver.

   Secuencia de excavación de una tumba con cubierta de lajas y antropomorfa.

   Apenas se han identificado alteraciones y expolios de las tumbas.

   Asimismo son muy escasos los objetos hallados dentro de las tumbas,

   tanto ajuares como prendas, amuletos o elementos del ritual de

   enterramiento.

   En lo que se refiere a la población, a priori se identificaron 71 individuos adultos, 30 infantiles y 6 neonatos, sin contar las reducciones, que, en todo caso, eran bastante escasas.

   Por último, hay que señalar que además del cementerio altomedieval

   se han excavado varias estructuras de cronología tardoantigua que se

   corresponden con los restos de un poblado, ya que incluyen un posible

   fondo de cabaña, un horno de fundición y unos 10 hoyos, identificados

   como silos de almacenamiento o con otras funciones indeterminadas.

   Una vez finalizada la intervención y agotada la estratigrafía

   arqueológica, se trabaja en la redacción de la memoria técnica que

   incluirá el tratamiento y estudio de materiales arqueológicos y un

   exhaustivo estudio antropológico de los restos óseos exhumados. El

   estudio antropológico se realizará en el Laboratorio de Evolución

   Humana del Área de Paleontología, que forma parte del Departamento

   de Historia, Geografía y Comunicación de la Universidad de Burgos.