El plan de los acusados crimen de Viniegra estaba "perfectamente orquestado, cada uno con su rol, hasta que se torció"

Primer día de juicio contra tres acusados por el crimen de Viniegra
Primer día de juicio contra tres acusados por el crimen de Viniegra - JPEG - Europa Press
Actualizado: jueves, 8 mayo 2025 17:26

"Si el agente forestal no hubiera visto tirar el cuerpo, estaríamos hablando de una desaparición", asegura el capitán de la investigación    

LOGROÑO, 8 May. (EUROPA PRESS) -

   El capitán de la Unidad Orgánica de la Guardia Civil, oficial responsable de la investigación, asegura que los tres acusados por el conocido como 'crimen de Viniegra' concertaron varios días antes el asesinato de la víctima, un hombre de 45 años al que uno de ellos le debía dinero por una deuda de drogas. "Todo estaba perfectamente planeado".

   Aquello fue durante una reunión que se produjo el 24 de julio de 2022 en Viniegra -el crimen se produjo el 9 de agosto-. Ese día, en una comida los tres trazaron el plan y aprovecharon para conocer dónde deshacerse del cadáver, una sima de más de 50 metros y de difícil acceso. "Todo estaba orquestado, hasta que se torció al no poder deshacerse del cuerpo la misma noche que ocurrió el crimen. Ahí comenzó un suplicio".

   "Lo que tenemos claro -afirma el Guardia Civil- es que se concertaron tres personas, las tres con toma de voluntad y decisiones. Todos tenían capacidades y sumaron voluntades, cada uno con su rol; Los dos hombres se deshicieron del cadáver y la mujer se quedó vigilando".

   Este jueves ha comenzado el juicio contra estas tres personas acusadas de asesinato por unos hechos que sucedieron entre el 9 y el 11 de agosto de 2022. Según relata el escrito de la Fiscalía y considera también el responsable de la investigación, el fallecido le reclamaba constantemente a uno de los acusados, J.A.G., el dinero de una deuda -alrededor de 13.600 euros- pero éste no tenía dinero para pagarla por lo que, con su pareja sentimental, J.S.A., y otro amigo, I.Z.A., -también procesados- concertaron el plan para matar a la víctima.

PRIMERO UN DISPARO, DESPUÉS GOLPES CON UNA PIEDRA

   En la extensa declaración del capitán -que se ha tenido que prolongar también en sesión vespertina- éste asegura que "la víctima recibió en primer lugar un disparo en la nuca, posteriormente, fue golpeado con una piedra con la intención de rematarle y, dos días después, arrojaron su cuerpo a una sima de Viniegra".

   También ha destacado "los fuertes desacuerdos" de los acusados a la hora de ejecutar los hechos, y todos los elementos diferentes que utilizaron -como, por ejemplo, un vehículo- para que no se les pudiera incriminar posteriormente. Ha asegurado también que la víctima acudió "engañada" a Viniegra porque "pensaba que iba a cobrar la deuda".

LA COMIDA DEL 24 DE JULIO DE 2022, CLAVE DE LA PREMEDITACIÓN

   El encargado de coordinar todas las investigaciones -que se han prolongado casi durante dos años- ha hecho un relato muy extenso de cómo transcurrieron los hechos. Con motivo de la deuda y al no poder saldarla, la pareja pensó en matar a la víctima y buscó a una tercera persona.

    Para ello concertaron una cita el 24 de julio de 2022 con el último acusado -un amigo de él (I.Z.A.)- en una comida en Viniegra. Una cita "que queda acreditada por el estudio de sus terminales telefónicos" y en donde no hay duda "de que estaban los tres".

   En esa cita, además, "el tercer acusado pudo escuchar un audio de la víctima exigiéndole a su amigo el dinero de la deuda de forma insistente". Como este último acusado era "conocedor de la zona de Viniegra, les propuso el lugar donde poder arrojar el cuerpo. Una sima muy profunda, en un lugar muy complicado de acceder".

   "Aquí ya tenemos la implicación de las tres personas para llevar a cabo el asesinato", ha afirmado. Por su parte, días antes del crimen, el 2 de agosto "empiezan los desacuerdos a la hora de cómo estructurarlo". En este sentido, explica el capitán, "hay una comunicación muy reveladora en la que el amigo le dice a la pareja: Me habéis puesto la cabeza loca".

   Ya el día de los hechos se engaña a la víctima "diciéndole que va a cobrar la deuda pero debe ser en Viniegra" para que acudiera. La víctima accede, "se monta en el coche con dos de los acusados -la pareja sentimental- y en el cruce de Villoslada (N-111) se para el coche y aparece el tercer acusado". Allí se le dio muerte a la víctima con una pistola de calibre pequeño y una piedra".

"NO SE PUDIERON DESHACER DEL CADÁVER"

   Aquella tarde "tras darle muerte" pero no poder deshacerse del cadáver "al estar muy oscuro, no conocer bien la sima, y ser un lugar de difícil acceso" ocultaron el cadáver "en una finca de uno de los familiares" del presunto autor material del disparo.

   "Hasta ese momento todo lo que se había orquestado iba perfecto, según lo planificado pero en ese momento comenzó a torcerse todo. ¿Qué hacemos con el cuerpo?".

   Con todo ello, y aunque a los días siguientes también intentaron deshacerse del cadáver, "no pueden hacerlo" y finalmente, el 11 de agosto, "el amigo -que escondió el cadáver en la finca de uno de sus familiares- le pide a la pareja -que estaba en Logroño- que acudiesen hasta la sima porque no puede tirar el cuerpo solo".

   La pareja, en principio, le indica que "no les funciona el vehículo, que la rueda está pinchada..." pero finalmente acude.

"ARRASTRARON EL CADÁVER"

   Ya en la sima, según el Guardia Civil los dos hombres "arrastran el cadáver y dejan una alfombra de sangre de la víctima bastante evidente e, incluso, se encuentra ADN de uno de los acusados en un cigarrillo". La mujer, afirma, se queda en actitud de vigilancia en el coche.

   En este momento, la casualidad quiso que un agente forestal que estaba en la zona de servicio, "con unos prismáticos" viera cómo dos personas arrojaban algo a una sima. Se acercó hasta allí e incluso mantuvo una conversación con ellos. Si no hubiera sido gracias a él, este delito se hubiera quedado en la desaparición".

LOS ACUSADOS SE INCULPAN ENTRE ELLOS

   Previamente a la intervención del responsable de la Guardia Civil ha tomado la palabra la defensa del acusado (J.A.G.) -quien mantenía la deuda- para asegurar ante el juez que su cliente no tuvo conocimiento de "ningún plan previo para matar a la víctima, ni para ocultar al cadáver. Ni sabía que el otro acusado, su amigo, -I.Z.A.- iba a disparar aquella noche".

   "No hay ninguna prueba que indique que mi cliente participó en ninguno de los hechos, más allá de ayudar. Estaba allí el día que se deshicieron del cadáver, pero si estuvo allí -sostiene- fue por las amenazas que el otro acusado le vertió".

   También ha tomado la palabra el abogado de la pareja sentimental de J.A.G., también acusada del delito de asesinato a pesar de que su abogado indique que permaneció en el coche en todo momento. Éste pide la plena absolución para su cliente porque sí que reconoce la deuda que tenía su pareja "pero eso no la convierte en partícipe de los hechos".

   Sí que afirma también que "estuvo en el coche los dos días -el del disparo y cuando arrojaron el cuerpo- pero no planificó nada. Ni mucho menos ella fue ejecutora material de absolutamente nada".

"EL TONTO ÚTIL"

   Finalmente, el abogado del último acusado, el que presuntamente disparó a la víctima, asegura que su cliente cometió un error: "Intentar ayudar a ocultar un cadáver".

   "Eso no lo vamos a ocultar porque le encontraron haciéndolo -en referencia al agente forestal-. Se le vio arrojar ese cuerpo" pero ante ello se pregunta: ¿Qué tipo de persona hace eso si no es responsable de la muerte?. En el mundo en el que se mueven los acusados, la respuesta no se hace con lógica. A veces las cosas se hacen por una lealtad mal entendida, por presión, por miedo...".

   A su juicio "mi cliente es una víctima. Es el tonto útil, la persona que les facilitó el lugar donde se iba a arrojar el cuerpo pero el plan lo tenían los otros dos acusados. El mayor interesado en la muerte de la víctima era J.A.G. y su pareja porque así arreglaban su problema económico".

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