La Rioja tiene 13,14 comercios por cada 1.000 habitantes, índice similar al de la media nacional

Actualizado: jueves, 3 julio 2008 20:38

LOGROÑO, 3 Jul. (EUROPA PRESS) -

El consejero de Industria, Innovación y Empleo, Javier Erro, ha presentado un estudio sobre las características del comercio del que ha resaltado que el índice de densidad comercial en La Rioja, es decir, el que mide el número de establecimientos por cada 1.000 habitantes es de 13,14, porcentaje similar al registrado por el conjunto nacional que asciende a 13,79.

Estos y otros datos sobre la oferta comercial, el perfil y la demanda del comercio riojano se han recogido en un estudio elaborado por el Observatorio de Comercio, que ha presentado el consejero a los miembros del Consejo Riojano de Comercio.

El Consejo es un órgano colegiado de carácter consultivo y de participación en materia de ordenación comercial de la Comunidad Autónoma de La Rioja. Está presidido por el consejero de Innovación, Industria y Empleo, y cuenta con representación de la Administración Autonómica, de la Federación de Empresarios, de la Cámara de Comercio, de las Asociaciones de Consumidores, de las organizaciones sindicales más representativas, de las Asociaciones de Comerciantes, de las Asociaciones de Distribuidores y de la Federación Riojana de Municipios.

Este estudio, elaborado a partir del censo encargado por el Gobierno de La Rioja a la Universidad de La Rioja; la Base de datos de la Cámara de Comercio; el Directorio de empresas del INE y 1.388 encuestas telefónicas personales (tanto a comerciantes como a consumidores) realizadas entre el 26 de mayo y el 27 de junio de 2008 analiza tres aspectos importantes del comercio: la oferta, el perfil comercial y la demanda.

LA OFERTA COMERCIAL

El índice de densidad comercial en La Rioja, que mide el número de establecimientos por cada 1000 habitantes, es similar a la nacional (13,14 en La Rioja y 13,79 nacional). Por municipios, Nájera y Santo Domingo de la Calzada alcanzan una densidad comercial mayor que Logroño, pero más centrada en alimentación.

Logroño y los municipios cabecera de Rioja Alta y Rioja Baja tienen una oferta comercial más variada. El resto de municipios, en su mayoría con escasa población, cuentan con una menor dotación comercial, destinada principalmente a la alimentación.

En 2007, La Rioja registraba 4.550 establecimientos comerciales, 46 más que en el año 2000. Además, en este periodo ganan protagonismo los establecimientos especializados que han aumentado en 257 establecimientos mientras que han disminuido notablemente los establecimientos no especializados (-315).

La estructura de estos establecimientos es de pequeño comercio: el 48,5% de los establecimientos no tiene asalariados y el 45% tiene entre 1 y 5 trabajadores. Estos porcentajes son similares respecto a los del conjunto nacional.

En cuanto al empleo generado en el sector, en los últimos siete años La Rioja ha registrado un incremento de 1.871 trabajadores en el comercio minorista, lo que supone un 18,1% más. Además, en este mismo periodo han aumentado los comercios con personal asalariado frente a los que no tienen personal contratado. El número medio de asalariados en el comercio se cifra en 3,75. Esta cifra es notablemente superior en alimentación, donde debido al peso de las grandes superficies, supera los 7 empleados de media.

En cuanto a la distribución comercial, el 61,2% de los establecimientos de la Rioja están en Logroño y en su zona perirubana; le sigue Calahorra (9,9%) y Haro (7,8%).

Además, la actividad de alimentación supone el 32,6% del total de establecimientos y tiene una índice de superficie de 0,41 metros cuadrados por habitante.

El sector textil tiene también un peso considerable, 23,1%, así como el equipamiento del hogar, 14,4%, que supera a la actividad de alimentación en superficie por habitante (0,54).

El comercio riojano está centrado en Logroño (56,1%) y, concretamente en el centro de la capital (25,8%, con un índice de dotación comercial de 19,18).

En los ocho años de la década 2000 se han abierto el 36% de los establecimientos comerciales en La Rioja, seis puntos y medio más que en toda la década anterior de los años 1990-1999, que se abrieron un 29,4%.

La antigüedad media de los comercios riojanos se sitúa en 18,4 años. Contrasta a este respecto la continua apertura de nuevos establecimientos con los que mantienen una trayectoria de más de 30 años.

La titularidad de los comercios de La Rioja se reparte de manera similar entre hombres y mujeres, aunque la balanza se desequilibra hacia ellos en alimentación y equipamiento del hogar, y hacia ellas en textil y farmacia, perfumería y droguería.

La edad media de los titulares es de 47,28 años. El 14,4% de los titulares con 60 años o más (edad de prejubilación) no cuentan en plantilla con ningún empleado, es decir, atienden ellos solos el negocio.

El 4,2% de los comercios riojanos están regentados por extranjeros, destacando su presencia en equipamiento del hogar. Además, el 16,4% de las contrataciones efectuadas en este sector fueron a trabajadores extranjeros y se observa un crecimiento de más de 10 puntos, frente al 3,3% de las contrataciones a ciudadanos extranjeros en comercio en 2001. Sin embargo pierde peso la contratación a jóvenes que disminuye del 72,1% del año 2001 al 59,9% del 2007.

La formación específica en comercio para los empleados es una realidad en cerca del 40% de los comercios, y son sobre todo los cursos relacionados con las ventas y atención al cliente los más recurrentes.

El comercio riojano externaliza tareas fiscales y de contabilidad mientras que el escaparatismo y las tareas de limpieza corren de su cuenta.

ANÁLISIS DE LA DEMANDA

El sexo y edad del encuestado siguen siendo claves a la hora de definir a los consumidores. Son las mujeres y el grupo de edad entres los 35 y 54 años los que realizan en mayor medida la compra tanto de productos cotidianos como ocasionales. No obstante, existe una tipología donde los hombres manifiestan un mayor interés: el ocio y el deporte.

En cuanto a los horarios comerciales, las posibilidades en cuanto a horario que ofrece el comercio riojano se adapta a las necesidades de sus consumidores, es decir, las compras se realizan en el horario más conveniente.

A este respecto, son aquellos que trabajan fuera del hogar los que comienzan a demandar la última hora de la tarde (20 a 22 horas) - un 29,1% de los trabajadores demanda este horario-, fuera del horario del comercio tradicional, como una opción para realizar sus compras.

Por otro lado, la posibilidad de realizar las compras los domingos o festivos no es una opción por la que los riojanos manifiesten gran interés, de hecho, sólo un 20% se muestra atraído por esta posibilidad. Este porcentaje crece sobre todo entre los consumidores más jóvenes.

La mayor parte del gasto generado en La Rioja permanece en la Comunidad por lo que no existe prácticamente fuga de compras al exterior de La Rioja (oscila entre el 0,2% y el 2,4% según el tipo de articulo adquirido).