Los riojanos ofrecen el primer mosto con positivas previsiones de cosecha en un acto que conjuga sol y gran asistencia

LOGROÑO, 21 Sep. (EUROPA PRESS) -

Un tiempo soleado y agradable y la asistencia masiva de público fueron los ingredientes con los que, hoy, se aderezó el acto del Pisado de las Uva, en el día de San Mateo. Los riojanos ofrecieron a su patrona, la Virgen de Valvanera, el primer mosto, esperando, y pidiendo, una buena cosecha, tal y como auguran las perspectivas.

En el día grande de las Fiestas de la Vendimia y San Mateo, la céntrica plaza de El Espolón de Logroño se vistió de gala para recibir a cientos de representantes de la sociedad, desde la Iglesia hasta el Ejército, la Política, Gobiernos regional y locales, que ocuparon su lugar frente a la Concha del Espolón para observar cómo se iban arrojando al tinajo uvas de todas las partes de La Rioja, para exprimir un mosto que representa el esfuerzo de todos los riojanos.

El acto comenzó poco después de las doce y media, momento en el que hicieron entrada en la plaza los componentes de la Agrupación Musical de Logroño, dirigidos por Ricardo Daniel Martínez. Tras ellos, dulzaineros y niños de todas partes de La Rioja les seguían ataviados con los trajes típicos.

El público abarrotaba un acto que, este año, contó como participantes activos de excepción a hijos y nietos de riojanos residentes Argentina y pertenecientes al Centro Riojano de Rosario.

Después de la llegada de la Agrupación hizo su entrada en escena la Virgen de Valvanera, que portaban miembros de su Cofradía. En ese momento, llegaron al lugar los representantes institucionales precedidos del presidente riojano, Pedro Sanz.

Con todos los asistentes en su sitio comenzaron los preparativos para el pisado de la uva. Los primeros en depositar racimos en el tinajo fueron los danzantes, entre los que se encontraban los del centro argentino. Después, contribuyeron con más uvas los reyes y las reinas de las diferentes cabeceras de comarca -primero La Rioja Baja, luego La Rioja Alta y, por último, La Sierra-.

También, niños representantes de los colegios de Logroño, entre ellos una nieta del autor del Himno de La Rioja, Laura Álvarez Pinedo y una menor, Valvanera, en silla de ruedas. Los Vendimiadores, Eva González y Héctor Palacios, fueron los últimos en aportar materia prima.

Llegó entonces el momento clave del acto; cuando los hermanos Urdiales -Antonio y Francisco- se unieron en un abrazo y pisaron las uvas, acompañados de la Agrupación Musical de Logroño, que interpretó la conocida popularmente como 'Calle Mayor de Logroño'

Fue el presidente riojano el encargado de abrir el grifo, junto a los Vendimiadores, y arrojar a un típico jarro riojano el primer mosto de la cosecha. Una cosecha que se espera con optimismo. El mosto fue bendecido por el obispo, Juan José Omella.

Tras los himnos de La Rioja y España, los encargados de coronar la bendición fueron, primero, el Grupo de Danza argentino Los Cachiberrios y, que interpretaron la Jota de las Vueltas de Arnedo y, después, el logroñés Grupo de Danzas Nieve Sainz de Aja.

Mientras duraban los bailes sucedió un pequeño incidente cuando una de las cámaras de Televisión Española sufrió un leve desmayo mientras grababa la retransmisión del acto. Fue inmediatamente atendida por Protección Civil, que se la llevó en camilla.

En el escenario, el grupo logroñés ofreció la 'Contradanza de Briones', que cuenta, como personaje que siempre ofrece la nota de humor, con el Cachiberrio, encargado de arrancar la risa bajando a ofrecer vino al presidente riojano, Pedro Sanz.

También bebieron el presidente del Parlamento, Jose Ignacio Ceniceros, el consejero de Presidencia, Emilio del Río, el alcalde de la ciudad, Tomás Santos, y, por fin, el Obispo que alzó la bota al público y recibió un aplauso de los asistentes.