Publicado 12/10/2016 11:18

Canalejas sustituye 'falso intercambiador' por plataforma logística de carga y descarga y un aparcamiento para policía

Imagen de Canalejas
EUROPA PRESS

Además de otro para el Samur, coches eléctricos de alquiler y taxis. El resto de plantas funcionarán como aparcamiento público de rotación

MADRID, 12 Oct. (EUROPA PRESS) -

La nueva ordenación de Canalejas sustituye el 'falso intercambiador' por una plataforma logística de carga y descarga bajo la calle Sevilla y la plaza de Canalejas, con un posible aparcamiento para la Policía Municipal dada la cercanía a Sol y sus numerosas intervenciones en el lugar y otro para el Samur por las mismas razones.

El Ayuntamiento también plantea un posible aparcamiento exclusivo para coches eléctricos de alquiler, un estacionamiento de taxis que acudan bajo demanda y otras instalaciones públicas relacionadas con la movilidad, ha avanzado el delegado de Desarrollo Urbano Sostenible, José Manuel Calvo, en una entrevista concedida a Europa Press. Todo ello enmarcado en el uso dotacional de transporte en el primer sótano bajo la calle Sevilla y la plaza de Canalejas.

Desarrollo Urbano Sostenible suprime las dársenas de autobuses que en el Plan Especial vigente ocupaban el primer nivel bajo rasante en la calle Sevilla. Es en este primer nivel donde se puede destinar la zona de carga y descarga de mercancías y espacio para cualquier servicio municipal relacionado con el transporte.

En el planteamiento de Ahora Madrid, el aparcamiento que ocupará el resto de las plantas bajo la calle Sevilla podría seguir funcionando como uno público de rotación.

El proyecto inicial tuvo que ser corregido mediante la reducción del impacto volumétrico. El otro aspecto a corregir era el relacionado con el 'falso intercambiador' subterráneo, como lo definió el delegado, que ha recordado que los estudios aportados por el Consorcio Regional de Transportes de Madrid en 2014 ya concluían que la demanda de la conexión bajo rasante de la zona destinada a los autobuses con la estación del Metro de Sevilla era muy escasa.

EL SOTERRAMIENTO PODRÍA TENER EFECTO DISUASORIO

Con la base de dicho informe y analizando el comportamiento de los usuarios del transporte público, el Consistorio llegó a la conclusión de que el soterramiento de las dársenas de autobús podía ser una desventaja al obligar a un desplazamiento vertical que tendría un efecto disuasorio sobre un amplio colectivo de viajeros.

Por todo ello se ha considerado que una reordenación en superficie de las líneas de autobús, junto a la disminución de las cabeceras/terminales en la zona ya apuntada en el informe del Consorcio, sería suficiente para mejorar el servicio de transporte público y ganar espacio para el peatón.

La plataforma logística por la que se apuesta ahora en lugar de la parada subterránea de autobuses es "una estructura más razonable y barata y con menos impacto porque no es lo mismo una rampa para que baje una furgoneta o un coche de policía que otra para que baje un autobús", ha explicado José Manuel Calvo.

RENOVAR EL APARCAMIENTO ACTUAL

Esta propuesta se está traduciendo ya en un Plan Especial que se llevará a Junta de Gobierno previsiblemente en este mes de octubre. Además estas obras supondrán una oportunidad para renovar, modernizar y adecuar aparcamiento público municipal situado bajo la calle Sevilla, construido en 1965.

Por otro lado, la dirección general de Espacio Público, Obras e Infraestructuras tiene que estudiar en la modificación del Plan Especial los costes que deberían asumir los beneficiarios de los accesos privados a través de la infraestructura pública prevista, además de su encaje legal.

Todo ello después de que el promotor del edificio privado colindante haya solicitado coordinar sus accesos con los de aparcamiento público, lo que supone un beneficio general al disminuir la ocupación de las rampas de acceso en la calle.

ACERAS MÁS AMPLIAS

La nueva ordenación amplía el ámbito del Plan Especial al afectar a la Carrera de San Jerónimo desde Sol a Cedaceros ya que se propone la modificación del reparto entre carriles de circulación y aceras, que aumentan sus dimensiones al considerarlas insuficientes para el elevado tránsito peatonal que soportan.

Actualmente son once las líneas de autobús que tienen su cabecera/terminal dentro del ámbito, cinco de ellas en la calle Alcalá y seis en la calle Sevilla. En la nueva ordenación se reubican las paradas en superficie mejorando el acceso del viajero hacia Sol y se trasladan las paradas de regulación a la calle Cedaceros y Virgen de los Peligros.