Alcalá.- El PSOE acusa a Aguirre de "indiferencia" al "dar la callada por respuesta" a los trabajadores de Bosch

Actualizado: miércoles, 18 julio 2007 16:13

MADRID, 18 Jul. (EUROPA PRESS) -

El portavoz adjunto del Grupo Parlamentario Socialista, Andrés Rojo, acusó hoy a la presidenta regional, Esperanza Aguirre, de "indiferencia" por "dar la callada por respuesta" al escrito que los trabajadores de la planta de Alcalá de Henares de la empresa Robert Bosch le entregaron el 27 de marzo en la localidad, para pedir su implicación de cara al inminente cierre del centro.

Rojo exigió "medidas a la Comunidad de Madrid para que se implique, no sólo ante la situación de Bosch que, a medio plazo, dejará sin empleo a más de 500 trabajadores, sino también ante otros casos de deslocalización industrial que están afectando a la Comunidad de Madrid".

La portavoz de Empleo socialista, Maru Menéndez, planteó acciones al Gobierno regional para evitar que "la actividad industrial en la región siga descendiendo", como hacer valer el cumplimiento del compromiso de la presidenta regional, Esperanza Aguirre, de que a ningún suelo industrial se le pueda dar otro uso. "La empresas saben que el cambio del uso del suelo puede salirles más rentables que la producción de 30 años", indicó.

La diputada explicó que, mientras la empresa Robert Bosch "está vendiendo que sólo se trata de un traslado a la planta de Aranjuez, a medio plazo se trata de una estrategia de cierre", tal y como señaló un miembro del comité de empresa que hoy se reunió con los socialistas, Tomás Amaso, quien afirmó que existe un Plan de viabilidad en Aranjuez que termina en 2009.

"Sin inversiones, la planta de Aranjuez también cerrará", apuntó Amaso, quien, a la espera de la reunión con la empresa el próximo viernes, duda de las intenciones de Bosch que, hasta el momento, sólo les ha propuesto el traslado a Aranjuez de 260 trabajadores con una reducción salarial del 7 por ciento, la prejubilación de 152 empleados y, en algún caso excepcional el traslado a la planta de García Noblejas.

Mientras no se hable de inversiones que puedan garantizar la producción de la planta de Aranjuez y así, evitar su cierre en 2009, desde el comité de empresa aseguran que no van a entrar en "ningún tipo de negociación", entre otras cosas, porque el Plan de Aranjuez "cae en una contradicción" al señalar que, en caso de cierre, los empleados serán trasladados a la planta de Alcalá, que para entonces ya no estará en funcionamiento.