MADRID, 21 Ene. (EUROPA PRESS) -
CC.OO. de Madrid exigió hoy a la presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, que convoque inmediatamente el Consejo de Madrid para proponer medidas activas contra el paro y que, por otro lado, postergue la eliminación del impuesto del patrimonio para disponer de más dinero para políticas sociales y laborales.
El secretario general del sindicato en Madrid, Javier López, indicó que la Comunidad está resistiendo "mal" a esta crisis porque el aumento del desempleo en 2008 ha sido mayor que la media nacional. "El Gobierno de Esperanza Aguirre ha perdido un año sin hacer nada y no se ha tenido ni una sola vez en el Consejo de Madrid para abordar la situación", indicó.
Por ello, le pidió que establezca una moratoria en la eliminación del impuesto de patrimonio, lo que reportaría, según sus cálculos, a las arcas regionales 630 millones de euros, para luchar contra "el primer problema de los madrileños, que no es Caja Madrid, ni la red de espías, sino el paro".
"Aunque los Presupuestos se aprueban a finales de año, cada año se producen 1.200 modificaciones a los mismos. Margen presupuestario siempre hay, y está en la recámara el pacto de financiación autonómica", dijo.
En este sentido, le instó a que convoque el Consejo de Madrid, un órgano en el que esta representado el Gobierno regional, los empresarios y los sindicatos, y que abra mesas de negociación "en las que se hable de la consolidación del sector industrial y del refuerzo de las obras públicas, energías alternativas, el turismo y el pequeño comercio".
Asimismo, López solicitó al Ejecutivo regional que negocie "más inversiones" y fortalezca los servicios públicos, entre ellos el Servicio Regional de Empleo, "con más medios y personas, con más apoyos a los desempleados, itinerarios laborales, planes de formación y recualificaciones".
Por otro lado, pidió al Gobierno regional que actúe contra los procesos concursales de las empresas "que aprovechan la crisis para realizar despidos injustificados"; que promueva y potencie la economía social; y que actúe para favorecer la liquidez de las pequeñas y medianas empresas (pymes).
López dijo a Aguirre que el mercado laboral "no es heredero del franquismo", tal y como señaló la presidenta regional la semana pasada. "Las relaciones laborales no son franquistas ni responsables de esta crisis. Son fruto de la democracia, de la Constitución Española y del Estatuto de los trabajadores", añadió.
El secretario general de CC.OO afirmó que "no tolerará el despido fácil ni barato que los empresarios quieren" ni que la negociación colectiva en 2009 se asiente en "restricciones salariales" porque, a su juicio, "ha sido la avaricia empresarial y la especulación la que ha destrozado la economía madrileña".
"Si eso es la base de la negociación, van por mal camino. No estamos de acuerdo que el campo sea convertir los servicios públicos en oportunidades de negocio, como apuesta regional por la privatización de colegios, hospitales, Telemadrid, el Canal de Isabel II o Caja Madrid".
LOS DATOS DEL PARO
El secretario regional de CC.OO. recordó que cada día de 2008 dejó 320 parados diarios y señaló que a este ritmo, "a finales de 2009, la Comunidad superará los 500.000 personas sin trabajo si el Gobierno regional no hace nada".
"En 2008 hubo un incremento de casi un 51 por ciento de paro respecto al año anterior y por primera vez hay más hombres que mujeres en paro, golpeando más a los menores de 25 años y a los mayores de 45, éstas últimas con cargas familiares y con hipotecas", dijo.
En este sentido, López manifestó que el paro ha afectado especialmente a la construcción, "donde casi se ha triplicado" en el último año; y señaló que el 20 por ciento, unas 70.000 personas, llevan un año en esta situación, por lo que están perdiendo ya las prestación. "A este ritmo, se agudizará y el 40 por ciento de los parados pueden estar el año que viene en esta situación", dijo.
El líder regional de CC.OO. señaló que el paro también ha golpeado a los inmigrantes, multiplicando por tres su tasa de desempleo en el último año, debido a que la mayoría trabaja en el sector de la construcción.