Controladores del SER piden a Delegación la consideración de autoridad pública ante las "continuas agresiones"

MADRID, 28 Oct. (EUROPA PRESS) -

Controladores del Servicio de Estacionamiento Regulado (SER) de la capital han entregado este mediodía un escrito a la Delegación del Gobierno en Madrid para solicitar la consideración de autoridad pública dentro del horario de desarrollo de sus funciones ante las "continuas agresiones" que sufren.

En el escrito, al que ha tenido acceso Europa Press, los representantes de CCOO y UGT han señalado que desde la implantación del servicio en noviembre de 2002 han solicitado medidas de protección para el personal ante las "continuas agresiones".

"Siendo cierto que cada vez se registran en menor cuantías, no es menos cierto que cada vez son de mayor gravedad, y el desamparo del colectivo incide en su salud física y mental", indican en el documento.

Los sindicatos han trasladado esta demanda a las empresas concesionarias, "destinándolas estas al Gobierno municipal de turno, que ha entendido que dicha autorización debe depender de otras instancias gubernamentales, como el Ministerio del Interior".

"Sea como fuere, que la idea sirva para reducir el número de ataques que reciben los profesionales de este sector en el ejercicio de sus función pública, puesto que aún siendo personal de empresas privadas, la función se realiza para una entidad pública, como es el Ayuntamiento de Madrid, y entendemos que no pueden dejar al personal a su servicio sin medidas de protección", han subrayado.

Los representantes de los trabajadores han recordado que del tratamiento de autoridad pública ya disfrutan otros colectivos de la Sanidad y de la Educación, "entendiendo la vulnerabilidad que padecen en el desarrollo del trabajo".

Finalmente, han aclarado que la pretensión del SER de Madrid no es ser autoridad pública como las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, sino que "simplemente que en el desarrollo de sus funcionales puedan gozar de veracidad". "Esta condición, aunque no elimina las agresiones, sí las aliviaría, y valdrán para tener un mayor reconocimiento social, y que en caso de producirse una agresión será penada con otra consideración más elevada y así repensada por el agresor", concluyen.

CONTROLADORES PIDEN CONFIDENCIALIDAD Y PENAS MÁS DURAS POR AGRESIÓN

En declaraciones a Europa Press, la representante legal de los Trabajadores UGT en el sector Eugenia Pillado ha explicado que los controladores del SER quieren que se les reconozca agentes de autoridad pública en el ejercicio de sus funciones para conseguir presunción de veracidad y así "no tener que defenderse primero delante del agresor y luego delante del juez, y para demostrar mejor que han sido agredidos".

También considera que así los datos personales de estos trabajadores serían confidenciales y no públicos como hasta ahora. "Este año llevamos entre 90 y 100 agresiones, entre físicas, verbales, vejatorias y machistas. Hay muchas compañeras con baja laboral por este motivo. Hay pocas dotaciones de Policía y estamos muy desprotegidas. A veces cuando tenemos la agresión la policía tarda mucho llegar", se ha quejado.

La sindicalista ha detallado que las peores zonas para trabajar eran La Ventilla y otros lugares conflictivos, pero que ahora sufren ataques en todo Madrid.

"Estamos en una temporada con repunte porque las agresiones les salen a sus autores baratas o gratis, como las verbales. Desde que Alberto Ruiz-Gallardón reformó la ley no podemos denunciar las agresiones físicas, solo podemos denunciar las físicas o cuando estamos en peligro de muerte inminente. Queremos que esto cambia", ha añadido.

Por su parte, Rosa, delegada sindical de CCOO en este sector, también se ha mostrado "harta de agresiones" y que a sus autores "les salga tan barato". "Las verbales estamos tristemente hechas a ella, pero cada vez ha habido un repunte de agresiones físicas, no sé si porque la sociedad en general está alboratada. Las penas que les ponen son nada. Estamos haciendo un trabajo para el Ayuntamiento, aunque sea a través de una empresa privada", ha manifestado.

La representante de los trabajadores ha afirmado a Europa Press que con la consideración de autoridad pública en el ejercicio de sus funciones, las agresiones a controladores del SER "no saldrían tan baratas", porque las penas por atacar a un agente de autoridad son superiores, según el Código Penal.