MADRID, 10 Oct. (EUROPA PRESS) -
Agentes de Policía Nacional han detenido a Carlos José F. P., de 45 años, como presunto responsable de un delito de tenencia ilícita de armas y de siete robos violentos a entidades bancarias, seis de los cuales los cometió en un intervalo de cinco meses por el método de 'A la apertura', informó hoy la Jefatura Superior de Policía de Madrid.
El presunto autor de los hechos, actuaba con la colaboración de Marcelino M. M., de 55 años, al que se le imputan los mismos hechos y que ingresó a mediados de septiembre en prisión tras ser detenido días antes junto a otros dos individuos.
La investigación, dirigida por el Grupo XII de la Brigada Provincial de Policía Judicial de Madrid, comenzó el pasado mes de marzo y en ella participaron los agentes de la Comisaría Local de Torrejón de Ardoz, toda vez que dos de los atracos a bancos se perpetraron en esta localidad madrileña.
A mediados del citado mes de marzo, los investigadores recibieron la denuncia de un trabajador de una entidad bancaria que afirmaba que dos hombres de unos 50 años habían intentado robarle cuando se disponía a abrir la sucursal. MODUS OPERANDI 'A LA APERTURA'
Por las descripciones que el empleado facilitó a los agentes, estos constataron que los atracadores utilizaban el 'modus operandi' conocido como 'A la apertura', que consiste en que estudian detenidamente la sucursal que van a asaltar, controlando el numero de trabajadores y su horario de entrada al trabajo.
Cuando los empleados van a abrir el local, les abordan e intimidan con armas de fuego y, si se resisten, no dudan en recurrir a una violencia extrema. Luego les obligan a desconectar los sistemas de alarma y a accionar los retardos de la caja fuerte, mientras esperan en el interior de la sucursal el tiempo necesario para dichas aperturas. Los ahora arrestados emplearon este método en, al menos, seis ocasiones en los últimos cinco meses.
Gracias a las gestiones practicadas, las declaraciones de las víctimas y los testigos y el particular 'modus operandi', los agentes averiguaron que Marcelino M. M. era uno de los presuntos atracadores. Se trataba de un conocido de la Policía ya que había sido investigado con anterioridad por el mismo Grupo por hechos similares.
A partir de aquí, los investigadores establecieron un dispositivo tendente a la localización y detención del otro compinche. Una vez identificado como Carlos José F. P., los policías vigilaron el domicilio donde supuestamente podría estar alojado y efectuaron un discreto seguimiento para arrestar también a su cómplice en los robos, Marcelino M. M.
A mediados de septiembre se le detuvo junto a otros dos individuos como presuntos autores de varios robos violentos en tanto que Carlos José fue arrestado apenas unos días después.
Con el preceptivo mandamiento judicial, los agentes registraron un trastero que Carlos José F. P. tenía alquilado a una empresa en un inmueble de la capital y al que, durante uno de los seguimientos, le habían visto acceder. En su interior, los policías hallaron dos pistolas, numerosa munición, varios pares de guantes, bufandas, gorras y mochilas, entre otros efectos.
Si bien a Marcelino M. M. le constan antecedentes policiales por hechos de similares naturaleza, Carlos José F. P. carece de ficha en los registros policiales. De hecho, a juicio de los investigadores desarrollaba una vida diaria aparentemente normal.
