MADRID 16 Oct. (EUROPA PRESS) -
El edificio abandonado del número 13 de la calle Barquillo será la sede de la Comisión Nacional de la Energía después de que la Junta de Gobierno, presidida por el alcalde de Madrid, Alberto Ruiz-Gallardón, haya aprobado el necesario Plan Especial para cambiar el uso residencial que tiene en la actualidad a dotacional.
De este modo se recuperará un edificio del siglo XIX en pleno corazón de la ciudad, catalogado con el máximo nivel de protección (nivel 1 grado integral). El inmueble, será remodelado interiormente para adaptarlo al nuevo uso. Las obras autorizadas permitirán también recuperar sus valores histórico- artísticos originales.
El edificio ocupa un solar de 592 metros cuadrados y una superficie total construida de 3.091 metros cuadrados. Cuenta con una planta semisótano, planta baja y cuatro alturas. Actualmente desocupado, anteriormente ha albergado oficinas en planta semisótano, local comercial en planta baja, y oficinas y residencial en el resto de plantas.
El Plan Especial prescribe la recuperación de la escalera y patio originales, así como el estudio de los planos del cuerpo de la planta baja y primera para recuperarlo tal y como fue concebido en su momento. El documento establece que se deberá ampliar el tramo de escalera principal hacia el sótano, junto con la sustitución del actual ascensor, eliminándolo del hueco de la escalera y ubicándolo en otro lugar del edificio donde no interfiera con ningún elemento protegido.