MADRID, 29 Ene. (EUROPA PRESS) -
La FAPA Giner de los Ríos afirmó hoy que tras la huelga de Educación Infantil que se ha mantenido en la región estos últimos días le "toca mover ficha" al Gobierno regional en este sector educativo.
"Ahora le toca mover ficha al Gobierno de la Comunidad de Madrid, que tiene que tomar buena nota de lo sucedido en los centros educativos de Educación Infantil durante las dos jornadas de huelga", indicó la federación en un comunicado, en el que señaló que si el Ejecutivo regional "continúa diciendo que la defensa de la escuela pública es 'sólo una batalla política desde la izquierda ideológica' cometerá de nuevo otro grave error".
"Nadie puede ya enfocar este asunto desde ese prisma, pues una de las características de la escuela pública es su pluralidad ideológica, política y social. Sería una necedad pensar que las familias que escolarizan a sus hijos e hijas en la escuela pública, y todas las personas que forman parte de ella no pertenecen a todas las ideologías existentes", consideró la FAPA.
Asimismo, apuntó que "lo cierto es que, tanto las personas que dieron su respaldo al Gobierno actual de la Comunidad de Madrid, como aquellos que no lo hicieron, le mandan un mensaje muy claro y contundente" que es que "está equivocado en su forma de actuar y debe cambiar".
En esta línea, expuso que "incluso los ciudadanos que apoyan en mayor o menor medida sus postulados políticos, no admiten la sustitución del modelo educativo público por el modelo económico privatizador y asistencial que quiere imponer". "Sería bueno que el diálogo social, que dice tener abierto de forma permanente la Consejería de Educación con la Comunidad Educativa, no fuera ciencia ficción para los titulares de los medios y se produjera realmente", consideró.
Por último, la Federación Francisco Giner de los Ríos agradeció el esfuerzo de familias al respaldar a los profesionales de los centros educativo que respaldaron la huelga. Así, expuso que las familias han demostrado que "comprenden la necesidad de una huelga que demanda la defensa del carácter educativo de la Educación Infantil", la "paralización del proceso privatizador salvaje que el Gobierno regional está desarrollando y la exigencia de la aprobación de unos nuevos Decretos de Infantil, al considerar los vigentes una burla hacia los derechos de los menores y de sus familias".
