Elude decir si, como fiscal, sentaría a Garzón en un banquillo porque los políticos no deben meterse en temas judiciales ni viceversa
MADRID, 15 Abr. (EUROPA PRESS) -
El alcalde de Madrid, Alberto Ruiz-Gallardón, se pronunció hoy acerca del grupo de víctimas del Franquismo que, desde Argentina, ha presentado una querella para que España investigue a todos los presidentes de Gobierno y ministros de la dictadura alegando que podrían haber sido cómplices de un delito contra la humanidad, reconomiendo ser "muy poco partidario de las causas generales" y opinar que "las personas deben ser juzgadas por lo que hacen, no por lo que son".
"Soy muy poco partidario de causas generales porque no sólo se cometen injusticias cuando, por el hecho de tener una condición determinada, a una persona se le introduce dentro de un juicio peyorativo. Me parece que exigir responsabilidades a los ex ministros o ejercer un criterio de reproche generalizado no cuadra en un Estado de Derecho, y que siempre absolutamente las personas deben ser juzgadas por lo que hacen y no por lo que son o han sido", afirmó en la rueda de prensa posterior a la Junta de Gobierno.
Además, hizo notar la "incoherencia" en la que, a su juicio, cae muchas veces la izquierda ya que "hace no muchos meses PSOE e IU votaron con el PP poner una calle a un ex ministro de Franco". "No entiendo cómo se puede hacer un reproche generalizado a un colectivo cuando en un caso determinado, porque juzgaron que esa persona tenía méritos adecuados, votaron a favor de darle el máximo honor", apostilló.
JUICIOS A GARZÓN
En relación al procesamiento del juez de la Audiencia Nacional Baltasar Garzón por parte del Tribunal Supremo (TS) como consecuencia de su intento de investigar los posibles crímenes durante la dictadura española, el alcalde de la capital eludió pronunciarse ya que "las relaciones entre los poderes del Estado no deben ser interferidas en ningún caso".
"No me gusta que los políticos nos metamos en temas judiciales, igual que no me gustaría que los jueces o fiscales se metieran en temas políticos. Así que no establecerá ninguna evaluación sobre las acciones que corresponden al poder judicial", explicó.
Finalmente, rechazó también opinar sobre si, dada su condición de fiscal en excedencia voluntaria, actuaría del mismo modo que el TS y sentaría a Garzón en el banquillo por un caso como éste. "Soy fiscal en excedencia voluntaria por mi decisión de dedicarme a la política. Yo hablo como alcalde de una ciudad y en el ejercicio de esa responsabilidad política, y por muchas razones, y especilmente por mi condición de alcalde y fiscal en excedencia, creo que las relaciones entre los poderes del Estado no deben estar interferidas en ningún caso", concluyó.
