Los hosteleros calculan que 17 negocios de Aurrerá desaparecerán y cien empleos se perderán con el adelanto del cierre

Actualizado: viernes, 23 julio 2010 19:30

MADRID, 23 Jul. (EUROPA PRESS) -

La Asociación de Empresarios del Ocio Nocturno de la Comunidad han denunciado que los hosteleros de la zona de Aurrerá vivirán la "muerte" de sus negocios con el anunciado recorte de horarios, en vigor después del verano, al calcular que desaparecerán hasta 17 locales y un centenar de puestos de trabajo.

Los empresarios consideran una "barbaridad" que el Ayuntamiento condene a los negocios "por no aplicar sus propias ordenanzas en contra del botellón, la venta clandestina de alcohol a menores o los músicos ambulantes".

Para el colectivo empresarial, se trata de medidas "desproporcionadas que se aplican de forma arbitraria e indiscriminada", sin distinguir la situación particular de cada una de las empresas y "haciendo que paguen justos por pecadores".

A eso suman el "deterioro del valor patrimonial" de los negocios en una zona "cuya principal desgracia es verse asolada por el botellón", el que consideran auténtico culpable de la situación. "Son las declaraciones de los residentes en la zona los que dicen que Aurrerá ya no es una zona de ocio importante ya que su actividad se ha reducido sensiblemente durante los últimos años siendo el núcleo de molestias la practica indiscriminada del botellón", han afirmado.

NO MÁS BARES

Una parte de la zona de ocio de los bajos de Aurerrá, concretamente la determinada por el Ayuntamiento como de contaminación acústica alta, no podrá abrir después del verano ni restaurantes, cafés espectáculo, salas de fiesta, discotecas y otros establecimientos como bares de copas, con o sin actuaciones musicales, mientras que los existentes tendrán que adelantar en una hora el cierre.

De acuerdo con lo establecido en la Ley del Ruido, el Ayuntamiento ha propuesto la declaración de Zona de Protección Acústica Especial a la comprendida entre las calles Hilarión Eslava, Fernando el Católico, Guzmán el Bueno y Rodríguez de San Pedro. Además, se han delimitado dos zonas en función de los distintos niveles de contaminación acústica.

La zona alta --cuando se supera en más de 10 decibelios los niveles admisibles-- comprende las calles de Gaztambide, entre Meléndez Valdés y Fernando el Católico; Andrés Mellado, entre Meléndez Valdés y Fernando el Católico; Meléndez Valdés, entre Hilarión Eslava y Andrés Mellado; Fernando el Católico, entre Hilarión Eslava y Andrés Mellado, en la acera de los números pares, e Hilarión Eslava, entre Fernando el Católico y Meléndez Valdés en los pares.

A esta zona se le aplicarán las medidas más restrictivas, como no permitir la apertura de nuevos locales de espectáculos y el cierre una hora antes en los ya existentes. En estos últimos sólo se admitirán los cambios de actividad cuando sea por otra de categoría inferior. Es decir, como ha expuesto el alcalde, una discoteca podrá cambiar de actividad para ser restaurante pero no a la inversa.

NUEVOS LOCALES PERO CON LIMITACIONES

Por otro lado, la zona baja -- cuando se supera en menos de 5 decibelios los niveles admisibles_ se localiza en las calles de Hilarión Eslava, Fernando el Católico, Guzmán El Bueno y Rodríguez San Pedro, excepto en los tramos definidos en la de contaminación alta.

En este perímetro sí se permitirá la instalación de nuevos locales de ocio nocturno pero con unas limitaciones, como que la distancia entre el nuevo y la zona de contaminación acústica alta no podrá ser inferior a 100 metros y la distancia entre locales del mismo tipo no podrá ser inferior a 50 metros. En estos locales no se adelanta el horario de cierre.

La declaración de Zona de Protección Acústica Especial a la zona de Aurrerá y su correspondiente Plan Zonal de Acción fue aprobada de forma inicial el pasado 20 de mayo. Una vez publicado en el Boletín Oficial de la Comunidad de Madrid, lo que ocurrió el 28 de mayo, se abrió un periodo de información pública y presentación de alegaciones. Tres fueron las alegaciones presentadas al texto y ninguna ha sido aceptada.