MADRID 4 Oct. (EUROPA PRESS) -
El Juzgado de Instrucción número 4 de Navalcarnero ha abierto diligencias previas para esclarecer si el alcalde de Sevilla La Nueva, Mario Utrilla (PP), cometió un presunto delito electoral durante las pasadas elecciones generales de 2008, cuando acudió a una de las mesas y supuestamente interrumpió el normal recuento de las papeletas que se estaba haciendo en ese momento.
Según la declaración de la denunciante --la presidenta de la mesa--, a la que ha tenido acceso Europa Press, los hechos tuvieron lugar el pasado 9 de marzo de 2008, últimas elecciones generales, cuando, al finalizar la votación del día, Utrilla irrumpió en la mesa A del distrito censal 01, sección 002.
La presidenta de la mesa, Alicia Correa, explica en su declaración, que tuvo lugar este viernes 2 de octubre, que el imputado acudió para preguntar "cuánto de más o de menos había obtenido el primero de su lista" y Correa le contestó que no se habían sumado todavía los votos pero que creía que por el número de papeletas "iban muy por encima de los demás".
A continuación, al parecer, Utrilla le espetó que no se estaban contabilizando bien las papeletas del PSOE, percibiendo la presidenta que el alcalde estaba "nervioso" y disconforme con la forma del recuento, "amedrentando con ello a los propios componentes de la mesa".
Tras un momento de discrepancia, según Correa, el alcalde obligó a los miembros de su partido que estaban en la mesa, además de a otro que no pertenecía a ésta, que se pusieran a recontar los votos, después de haberlos manipulado en el sentido de que los quitó de la mesa en la que se estaban contando y se los llevó a otra.
En ese momento, la presidenta, a la que la Ley electoral recoge como máxima autoridad, le señaló que eso no se podía hacer y, según la denunciante, el alcalde le dijo que "se iba a enterar" y hasta la insultó, motivo por el cual, decidió llamar a la Policía local y hablar con la Juez de Guardia, que pidió que el alcalde se marchara del lugar.
El primer edil se marchó finalmente. La denunciante asegura que en un principio Utrilla no presentaba acreditación --que consiguió más tarde-- y que un problema que tuvo con su negocio en un polígono de la localidad vino posteriormente, cuando antes "no había tenido ningún problema".
Los socialistas de Sevilla La Nueva destacaron en un comunicado que todos estos acontecimientos se desarrollaron en un clima de "amenazas e insultos" por parte de Utrilla a la presidenta que se vio obligada a recurrir en su defensa a la Juez de Guardia, que "tuvo que enviar al Colegio electoral fuerzas de orden público para terminar con las actuaciones inadecuadas del alcalde.
"Estos hechos tan deleznables de por sí adquieren una mayor gravedad cuando la persona que lo realiza, como es este el caso, es ni más ni menos que el alcalde del que se espera sirva de modelo y de referencia con su conducta en defensa de los derechos y libertades de todos los ciudadanos", apuntaron.
Por ello, esperan que esta actitud, "que tanta vergüenza y daño ha hecho y hace a todos los vecinos", en justicia sea "castigada y sirva para que Mario Utrilla cambie su forma de actuar, tan prepotente y desconsiderada, y por tanto, respete siempre la Ley aunque le disgusten los resultados electorales adversos", concluyen.