MADRID 1 Oct. (EUROPA PRESS) -
La concejala socialista Carmen Sánchez Carazo ha denunciado que el Gobierno municipal presidido por Alberto Ruiz-Gallardón ha celebrado el Día Internacional del Mayor mientras reduce las horas del servicio de ayuda a domicilio.
La socialista ha dicho que ese recorte siempre es negado desde el Ejecutivo local achacándolo "a un falso estrangulamiento financiero del Ayuntamiento a manos del Gobierno de España".
"Paradójicamente, esa irreal dificultad del Ayuntamiento de Madrid para financiar los servicios sociales, la recogida de basuras o la iluminación de la M-40 no afecta a gastos tan superfluos como los más de 500 millones de euros gastados en la reforma del Palacio de Cibeles, a los 24 millones que ha costado el despacho del alcalde o a los más de 500.000 euros invertidos en publicitar la finalización de las obras de la calle Serrano", ha criticado.
Carazo ha sostenido que en la capital viven alrededor de 630.000 personas mayores de 65 años, de las que de 200.000 tienen más de 80 años. De ellas, un 40 por ciento "vive en soledad". La edil ha denunciado "la sistemática pérdida de derechos" de estos madrileños.
La edil ha sostenido que no se están tramitando más altas en el servicio de ayuda a domicilio que "las muy urgentes" y se está informando a numerosos solicitantes que se les concede el servicio pero que no se les va a prestar por falta de presupuesto.
En paralelo, ha apuntado que "algunas de las empresas privadas que gestionan el servicio de ayuda a domicilio del Ayuntamiento de Madrid han informado a los sindicatos del sector que se les ha requerido una disminución del 15 por ciento en la facturación, por lo que se verán obligados a hacer un recorte de personal".
A eso ha sumado que en la capital hay un Consejo Sectorial de Personas Mayores que "apenas si convoca a sus miembros y no se les tiene en cuenta en los asuntos que les compete", que las juntas de los centros municipales de mayores "prácticamente no tienen competencias" y, encima, el Gobierno municipal "pretende reducirlas aún más".
Por otra parte, Sánchez Carazo ha subrayado que "si bien es la presidenta de la Comunidad de Madrid la que está boicoteando la Ley de Dependencia, tal hecho no sería posible sin la complicidad callada del alcalde, cuya opinión al respecto brilla por su ausencia".