MADRID 2 Jun. (EUROPA PRESS) -
El portavoz municipal socialista en el Ayuntamiento de Madrid, David Lucas, pidió hoy al Consistorio que no demore los trabajos de rehabilitación de la colonia Urpinsa y que lo haga "lo antes posible y de manera inminente" puesto que muchas casas se encuentran gravemente agrietadas.
Durante su visita a la Junta de Distrito de Villa de Vallecas, Lucas recordó que durante esta y la pasada legislatura ha realizado varias visitas a esta colonia, situada en la calle Puerto Lumbreras, una de las áreas de rehabilitación paralizadas "por el enfrentamiento entre la Comunidad y el Consistorio matritense para su ejecución".
"Hemos llevado varias iniciativas al Pleno del Ayuntamiento, a la Junta de distrito y a las comisiones informativas y hemos conseguido que el Ayuntamiento de Madrid se comprometiera a que, independientemente de los acuerdos con la Comunidad, se llegara a la rehabilitación de la colonia Urpinsa", indicó.
Lucas manifestó que ahora en el Consistorio matritense "están difiriendo en el tiempo" la ejecución de dicha rehabilitación, por lo que piden que se realice "lo antes posible para que tantos años de lucha y esfuerzos del PSOE y de los vecinos puedan verse culminados con éxito".
El portavoz socialista estuvo acompañado por uno de los afectados, Francisco Mota, que recordó que el problemas estructurales de las viviendas de la colonia proceden del año 1999, cuando unas obras del Metro de Madrid las agrietaron al topar con terreno arcilloso. Según explicó, las comunidades más afectadas son las correspondientes al número 28 y 30 de Puerto Lumbreras.
"Al principio hubo un acuerdo de 1.641 millones de pesetas para rehabilitar esas viviendas. Luego nos dieron muchas propuestas, todo mentira, y ahora hay una rehabilitación integral que parece que no se ponen de acuerdo", dijo Mota, que apostó por la demolición de los edificios para buscar el firme a ocho metros y micropivotar los cimientos.
No obstante, el vecino, asociado en una comisión de afectados, se quejó de que ya han pagado 21.000 euros y que ahora les piden 9.000 más, mientras que las grietas "están de dos dedos y afectan a todos los muros de carga".