MADRID 28 Nov. (EUROPA PRESS) -
El Servicio Madrileño de Salud ha planeado un incremento de 825 camas de hospitalización desde este mes de noviembre hasta el próximo mes de mayo de 2008 para hacer frente a las necesidades expresas del invierno.
Estas nuevas camas, que podrían verse ampliadas según la evolución de la demanda, vienen acompañadas también de medidas de refuerzo para agilizar el paso de los pacientes por Urgencias, con el fin de que los hospitales puedan atender debidamente el probable aumento de ciudadanos que requieran asistencia.
"Cada servicio de Urgencia hospitalaria de la red pública contará con boxes de alta resolución, es decir, consultas rápidas para la patología que no requiere hospitalización", apunta el Servicio Madrileño de Salud en un comunicado. Para ello, cada paciente pasará previamente por un sistema de "triaje" en el que los profesionales, utilizando escalas objetivas de clasificación, deciden el lugar más adecuado para la atención del paciente.
Otra de las medidas que el Servicio Madrileño de Salud pone en marcha en Urgencias es la agilización de las altas, bien porque el paciente pase a su domicilio o porque sea derivado a centros sanitarios de apoyo, actuando sobre la rapidez del transporte sanitario para así reducir el tiempo de permanencia en Urgencias y, para aquellos que sean dados de alta hospitalaria, se habilitan salas de espera donde pueda estar el paciente en espera de transporte sanitario o de ser recogido por sus familiares.
De igual modo, se reforzará la plantilla destinada al servicio de Urgencias, tanto sanitarios (facultativos y Enfermería) como no sanitario (celadores y auxiliares administrativos), en función de las necesidades.
La Comisión de Seguimiento de la Gripe continuará con sus funciones de coordinación de actuaciones. Además, el Servicio de Urgencias Médicas de la Comunidad de Madrid, SUMMA 112, coordinará, en caso necesario medidas excepcionales por situación de saturación o sobrecarga de algún servicio de Urgencia de los centros sanitarios, facilitando las derivaciones o traslados entre los distintos centros hospitalarios.
Con independencia de estas actuaciones, los médicos de Atención Primaria continuarán con su labor informativa a los enfermos en relación con las medidas preventivas, así como en la concienciación de la buena utilización de los recursos ya que los síntomas de gripe por si solos no justifican acudir a las urgencias hospitalarias.