'Simon Boccanegra', una de las óperas de Verdi memos conocida, cierra la temporada del Teatro Real

Antonio Moral y López Cobos terminan su ciclo al frente de la dirección escénica y musical del coliseo con este espectáculo

Europa Press Madrid
Actualizado: lunes, 12 julio 2010 16:33

MADRID, 12 Jul. (EUROPA PRESS) -

'Simon Boccanegra', una de las óperas de Verdi menos conocida, cierra la 13ª temporada del Teatro Real. El coliseo madrileño ofrecerá ocho funciones, del 17 al 29 de julio, de este espectáculo con el que también Antonio Moral y Jesús López Cobos terminan su ciclo al frente de la dirección escénica y musical respectivamente de este teatro.

Dirigida escénicamente por Giancarlo del Monaco, esta producción, la misma que pudo verse en el Teatro Real en 2002, presenta la novedad de una escenografía renovada diseñada por Michael Scott e inspirada en la obra del arquitecto de Hitler, Albert Speer. En aquellas representaciones el acento estaba puesto en los "tintes dramáticos", ha explicado Moral este lunes, y resultaba "un poco catastrófica". "Ahora, se ha pintado de mármol blanco y el contraste con el vestuario le proporciona un carácter distinto", señala. "Así, de un mausoleo opresivo y difícil de iluminar, el espacio escénico aparece justamente como todo lo contrario", añade Moral.

Otra de las novedades se halla en el doble reparto (el segundo, con tres funciones, protagonizado por Plácido Domingo y Angela Gheorghiu) y que cuenta con artistas de la talla de George Gagnidze (que debuta en el papel de Simon Boccanegra); Ferruccio Furlanetto (como Jacopo Fiesco); Inva Mula (que se estrenará en el personaje de Amelia Grimaldi) y Marcello Giordani (como Gabriele Adorno), que junto a Gheorghiu debutan operísticamente en el coliseo madrileño.

Moral no ha olvidado mencionar al barítono Carlos Álvarez, que aún se halla convaleciente de una operación realizada el pasado mes de febrero, y que era quien iba a cantar el papel protagonista de esta ópera.

"RENDIDO A SUS PIES"

Por su parte, el maestro Jesús López Cobos ha recordado que fue en 1972 cuando dirigió por primera vez esta ópera en Berlín. "Era mi tercer Verdi y caí rendido a sus pies aunque, por esos años era una obra casi desconocida", confiesa recordando que su estancia al frente de la dirección musical del Real comenzó y ahora termina con una obra de este músico italiano.

López Cobos ha resaltado que esta ópera se escribió en 1857, cuatro años antes de que se crease el Reino de Italia, y que el joven Verdi, ansioso de alcanzar la unidad italiana, estuvo muy involucrado en la política. "La figura de Simon Boccanegra le atrajo por lo que significaba de búsqueda de la paz y la unidad", señala.

"Sin embargo, esta partitura fue un fracaso ya que el público consideraba que no estaba a la altura de composiciones anteriores suyas y él prefirió dejarla dormir hasta 1881, cuando decidió volver a escribir", indica López Cobos. Así, Verdi reescribió, reorquestó e incluso añadió nuevas escenas a esta ópera en la que la presencia del mar es fundamental, "y sobre todo la orquestación", añade.

El director musical ha destacado el dúo final de Boccanegra con Amelia, cuando se da cuenta de que es su hija, así como el dúo con Fiesco, a quien le comunica que ella es su nieta y por fin encuentra la paz. "Es de los momentos más importantes de toda la producción de Verdi", afirma. "La obra concluye con una frase: 'Paz para él' y es también una bonita manera de terminar en el Teatro Real. Descanse en paz", apostilla López Cobos.

"UN TEATRO ATREVIDO"

Cuando se les pregunta por la evolución del coliseo madrileño en estos últimos 13 años desde su reapertura, Moral y López Cobos lo tienen claro: "El Teatro Real es bastante atrevido y moderno. A excepción de una se han programado todas las obras de Janácek y muchas de Britten, por ejemplo", recuerdan.

El asunto de cómo lo percibe el público es otra cosa. "Poco a poco va entrando y puede decirse que en el Real el público ha evolucionado mucho en estos años y que existen espectadores muy diversos. Los hay reaccionarios pero también están los que aplauden mucho", dice Moral.

En cualquier caso, un teatro público como el coliseo madrileño "no puede dedicarse a entretener al espectador", explica. "La ópera es un espectáculo total y no podemos banalizar las grandes obras maestras. Por eso al público hay que pedirle complicidad y nosotros hemos de ofrecer una amplia panorámica y arriesgar", señala consciente de que el Real tiene "un público inventado que no posee tradición operística".

TIRANÍA DE LOS DIRECTORES DE ESCENA

En este sentido, el aún director artístico del coliseo ha indicado que, si primero mandaban los cantantes, luego le llegó el turno a los directores musicales, y en estos momentos el mundo de la ópera se encuentra "bajo la tiranía de los directores de escena".

"Yo creo que las óperas no se pueden ver siempre de la misma manera y defiendo a los directores de escena inteligentes que plasman la obra con independencia de donde tengan lugar. Pero es verdad que hay otros que no ofrecen ningún interés o que son oportunistas y que hacen una gran carrera a base de polémica", agrega.

Para López Cobos, el gran repertorio "siempre será fácil de vender" aunque aquí hace falta "tiempo para crear públicos que vayan al teatro por la obra en sí y no por los cantantes". "Si no hay un equilibrio entre lo musical, lo vocal y lo escénico se hace un flaco favor a la obra", asegura.

'Simon Boccanegra' se retransmitirá el 25 de julio en una pantalla gigante en la Plaza de Oriente y para todo el mundo a través de Radio Clásica y de la Unión Europea de Radiodifusión.

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