Tomás Gómez defiende que España promueva la banca pública en la UE para regular y amortiguar tensiones financieras

MADRID, 12 Jun. (EUROPA PRESS) -

El secretario general del PSM-PSOE, Tomás Gómez, defendió hoy que el gobierno español defienda "la existencia de una banca pública en un porcentaje del sistema financiero del conjunto de la Unión Europea" para que pueda regular y amortiguar las tensiones financieras que se producen en los mercados financieros.

En un acto político en la sede del PSM de Callao, ante un salón de actos abarrotado de dirigentes socialistas, Gómez hizo un repaso de los 3 años de gobierno popular en la Comunidad de Madrid pero se explayó en su concepción política del proyecto socialista para el futuro. Defendió "repensar Europa" para que su seña de identidad, el estado del bienestar, salga reforzada de esta crisis en la que se ha demostrado la necesidad de regular los mercados y reordenar el sistema financiero.

"Esta crisis financiera ha puesto de manifiesto que es absolutamente necesaria la existencia de una banca pública en un porcentaje del sistema financiero del conjunto de la Unión. En España tenemos las cajas de ahorro, en otros países hay otras entidad financieras con carácter público o casi público", explicó Gómez, que insistió en la necesidad de defender "desde el gobierno de España, que es un gobierno de izquierdas, se articule la propuesta de crear una parte del sistema financiero del conjunto que sea público y hacer frente de elemento regulador y amortiguar cuando se produzcan tensiones y crisis financieras como las que hemos vivido.

Desde un punto de vista regional, el líder del PSM también consideró que hay que hablar del futuro de las cajas de ahorro en España, pues éstas "no pueden vivir de las comunidades autónomas porque son elementos sustanciales del sistema financiero español". "Es necesario en este país una nueva ley de cajas que a mi juicio haga que las cajas dependan o sean tuteladas por el gobierno central y el Banco de España, porque son las únicas entidades financieras públicas que hay en nuestros países y por lo tanto son esenciales en nuestro sistema financiero".

REGULAR LOS MERCADOS

Asimismo, Gómez recalcó que para salir de la crisis económica no sólo hay que tomar medidas de impulso de las economías, "la primera medida es la regulación de los mercados porque los mercados no son abstractos son empresas que operan, a las que hay que marcar unas reglas del juego que no han funcionado y que nos han llevado a la crisis más grande de nuestra historia".

Por ello, el secretario general del PSM defendió que hay que "criminalizar" y aplicar el Código Penal a "aquél que vierte informaciones falsas en el mercado para producir caídas o subidas de la bolsa o del sector energético o del sector bancario para ganarse unos cuantos miles de millones en unas cuantas horas".

Consideró que es momento de apostar por lo público, por la garantía que supone lo público, por ejemplo, en las agencias de calificación. "¿Cómo pueden depender no sé cuantos millones de griegos, franceses o alemanas de lo que diga una consultora privada acerca de la economía griega, francesa o alemana, una consultora privada a la que nadie audita, controla o inspecciona? Claro que tiene que haber agencias de calificación que nos digan si las economías crecen, van bien o no, pero tienen que ser públicas. ¿Alguien se imagina mejores datos estadísticos que los del INE en España? ¿Alguien se imagina mejores datos que Eurostat? ¿Cómo podemos asumir agencias de calificación que, por cierto, todas de capital americano, para decidir si un país es más o menos solvente o tiene un futuro más o menos mejor?, se preguntó.

Gómez recordó que hace 25 años los españoles dejaron de ser ciudadanos de segunda con la entrada de España en la UE de la mano de un gobierno socialista, y que hace poco se produjo la conmemoración de la caída del Muro de Berlín, que supuso una nueva etapa en el mundo. En este sentido, señaló que la caída del Muro tuvo como consecuencia la hegemonía del libre mercado como forma de funcionamiento económico incuestionado en el conjunto de la comunidad internacional y el "talibanismo en la economía de mercado y la economía por encima de los mercados."

"Se ha llegado a la idolatría a los mercados, pensando que los gobiernos tienen que estar para no molestar a los mercados, considerados como algo abstracto, pues nadie sabe qué es exactamente 'los mercados'. Es como llegar a la piedra sacra y ofrecer sacrificios, generalmente humanos, a estos mercados para que sigan funcionado y no colapsen la economía mundial. La caída muro también supuso la globalización económica, pero no se produjo una globalización del estado de bienestar. Es verdad que se implantó el mercado hasta el último rincón del planeta, pero no las democracias", destacó.

Pero, a su juicio, "los mercados no son abstractos". "Esto hay que decírselo a los ciudadanos porque estamos en un momento histórico y los socialistas tenemos un papel relevante. Los mercados son empresas que tienen por objeto obtener mayor beneficio en el menor tiempo posible, tienen unas reglas de juego que son las legislaciones nacionales e internacionales. Cuando se ha instalado en los últimos 20 años que la economía está por encima de la política y que no deben estar regulados por la política porque son más eficientes, lo que se produce no sólo es la desregulación de los mercados, sino una auténtica anarquía en el sistema económico, es decir, empresas que buscan obtener el máximo beneficio en el menor tiempo posible y con la menor regulación posible", lamentó.