MUNICH (ALEMANIA), 11 Mar. (EUROPA PRESS) -
El grupo automovilístico alemán BMW, que comprende las marcas BMW, Mini y Rolls-Royce, obtuvo un beneficio neto de 210 millones de euros en 2009, lo que supone una caída del 36,4% respecto a las ganancias de 330 millones contabilizadas en 2008, informó hoy la compañía.
Los ingresos de la multinacional alemana se situaron el pasado año en 50.681 millones de euros, lo que se traduce en una disminución del 4,7%, mientras que el resultado antes de impuestos creció un 17,7%, con 413 millones de euros.
BMW, que mantendrá sin variación el dividendo que prevé distribuir entre sus accionistas, vendió en todo el mundo 1,28 millones de automóviles en 2009, lo que representa una reducción del 10,4% en comparación con 2008.
Por marcas, las ventas de automóviles de la firma BMW totalizaron 1,06 millones de unidades, un 11,1% menos, mientras que las entregas de Mini se redujeron en un 6,8%, con 232.425 unidades. Rolls-Royce vendió 1.002 coches, un 17,3% menos.
Al cierre de 2009, la compañía con sede en Munich disponía de una plantilla formada por 96.230 empleados, unos 3.700 trabajadores menos que en 2008, como consecuencia de los acuerdos de prejubilaciones y de las bajas voluntarias aplicadas por la empresa.
El grupo espera que la crisis financiera y económica siga teniendo impacto en la industria del automóvil este año. No obstante, la compañía espera mejorar su rentabilidad gracias a la gradual recuperación de la economía a lo largo de 2010.
"Somos cautelosamente optimistas", manifestó el presidente de la compañía, Norbert Reithofer, quien pronosticó que la empresa conseguirá elevar sus ventas a un ritmo de "un dígito" en 2010, hasta alcanzar 1,3 millones de matriculaciones en todo el mundo.
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