MURCIA, 26 Ene. (EUROPA PRESS) -
Los regantes murcianos se manifestarán el próximo jueves, 5 de febrero, contra cualquier parte de la reforma del Estatuto de Castilla-La Mancha que ponga en peligro la pervivencia del trasvase Tajo-Segura, según anunció hoy, en rueda de prensa, el presidente del Sindicato Central de Regantes del Acueducto Tajo-Segura (Scrats), Francisco del Amor, quien indicó que esta protesta quiere servir de "toque de atención" a los políticos que están negociando la reforma estatutaria.
La manifestación, que hoy fue aprobada en la junta de gobierno del Scrats y ratificada posteriormente por el Comité de Crisis ante la Sequía, irá precedida de una asamblea general extraordinaria de los regantes, abierta a toda la sociedad, que tendrá lugar, a partir de las 17.00 horas, en la Cámara de Comercio de Murcia.
A continuación, los asistentes partirán en manifestación por la Gran Vía Escultor Salzillo de la capital murciana, hasta la Plaza Fuensanta, portando una pancarta en la que se podrá leer 'En defensa del trasvase Tajo-Segura. No al Estatuto de Castilla-La Mancha', siguiendo la estela reivindicativa de la gran manifestación de julio de 2005, que tuvo por eslogan 'En defensa del trasvase. Necesitamos agua'.
No obstante, Del Amor defendió que se trata más de una "concentración" como "primer toque de atención", y la justificó en que "no sabemos lo que se está negociando en la comisión que hay creada al efecto, y creemos que se debería haber llamado a las partes afectadas, tanto a los regantes como a la sociedad".
"Estamos que no nos llega la camisa al cuerpo", reconoció Del Amor, quien confió en que los presidentes regionales de Murcia y la Comunidad Valenciana, Ramón Luis Valcárcel y Francisco Camps, respectivamente, mantengan el acuerdo alcanzado hace apenas unos días en la capital regional, en contra de la fecha de caducidad y de la reserva estratégica de 600 hm3. "Esperamos que sea así y que, si no se respeta esto en el texto, los diputados del PP de Murcia y Valencia voten en contra", apostilló.
Precisamente, el 3 de febrero se cierra el plazo de alegaciones a la reforma del Estatuto castellanomanchego y, con su protesta, los regantes quieren advertir que "no vamos a consentir que se toque el trasvase", así como piden conocer "en qué condiciones se van a quedar las alusiones al Tajo-Segura en el texto final".
Y es que, tanto el Scrats como el Comité de Crisis se oponen a sustituir la fecha de desaparición del trasvase por una alusión a la Directiva Marco del Agua de la UE "porque es como poner el 2015, ya que es cambiar una palabra por otra y no estamos dispuestos a transigir", como tampoco en que se incluya una reserva estratégica de 600 hm3 "porque aunque se diga que es para toda la cuenca la cabecera quedaría en una situación totalmente desfavorable", ni tampoco a un cambio de toma.
"Todo esto lo sabemos porque lo hemos leído en los medios de comunicación", se quejó el presidente de los regantes murcianos, quien se preguntó qué fue del pacto que firmaron PP, PSOE e IU en la Región de Murcia defendiendo el trasvase y la interconexión de cuencas. "Esto fue hace meses, pero no tengo ni idea de lo que está pasando o si es que están esperando a presentarlo en la Cortes para paralizar el Estatuto", agregó.
NO A LAS DECISIONES SALOMÓNICAS.
A su vez, Del Amor se mostró contrario a que se llegue a una solución de consenso que logre recoger las aspiraciones del presidente socialista de Castilla-La Mancha, José María Barreda, y de la secretario general del PP, María Dolores de Cospedal, pues "ya estamos escamados de anteriores intentos de darle gusto a las dos partes". "Cuando ha habido decisiones políticas salomónicas siempre, siempre, hemos salido malparados", recalcó.
Finalmente, consideró "aberrante" que "desapareciera un regadío como el que tenemos en la Región de Murcia", pues "no tendría ningún sentido", y reiteró en la necesidad de que "se llegue a un gran pacto de Estado respecto al agua, por lo menos para saber a qué atenernos en 8 ó 10 años", concluyó.