Los productos tradicionales y los relacionados con Halloween comparten protagonismo en las pastelerías artesanas

Escaparate con motivo de Halloween de pastelería Maite, en Murcia
Escaparate con motivo de Halloween de pastelería Maite, en Murcia - EUROPA PRESS
Publicado: sábado, 29 octubre 2022 17:59

El sector detecta que los clientes vuelven a las pastelerías artesanas tras la pandemia al demandar más calidad del producto

MURCIA, 29 Oct. (EUROPA PRESS) -

Los productos relacionados con Halloween como tartas o piruletas ya representan aproximadamente el 50% de las ventas de las pastelerías artesanas de la Región de Murcia, que mantienen la otra mitad de las ventas de productos tradicionales como el mazapán, los huesos de santo y los buñuelos.

Así lo ha hecho saber a Europa Press Juan Carlos Hernández, propietario de Confitería Maite y portavoz de la Asociación Regional de Empresarios de Pastelería (AREPA), quien ha señalado que el sector está "contento" en cuanto a la evolución de las ventas, tanto de los productos más tradicionales como de los productos "más modernos" y relacionados con Halloween.

Ha destacado que la diferencia entre los consumidores de unos productos y otros es "muy generacional". Y es que los consumidores más mayores, con edades a partir de los 40 y 50 años, suelen ser "muy respetuosos con la tradición y afines a la fiesta de Todos los Santos", con la adquisición sobre todo de mazapán, huesos de santo, buñuelos (de crema, chocolate, vainilla o nata).

Por su parte, el perfil del consumidor de prodctos relacionados con Halloween es "muy diferente" porque la tradición es "más desenfadada". Suelen ser jóvenes y población foránea, de fuera de España, que sueñen comprar "calabazas, tartas con motivos de Halloween, piruletas de chocolate con esos motivos o encargos especiales para esa fiesta que se celebra de noche y muchos productos para niños". Ha puntualizado que siguen siendo productos "muy artesanales" pero "muy a medida del cliente" ya que se hacen por encargo.

Como curiosidad, ha señalado que "al cliente tradicional no le hace muchas veces gracia el tema de Halloween" y ven con suspicacia, incluso, la decoración con calaveras o calabazas, que no tiene mucho que ver con Todos los Santos y con visitar los cementerios. "Pero está bien que haya diversidad", ha señalado.

AUMENTO DE LA INFLACIÓN

Por otro lado, Hernández ha señalado que "ola preocupación del sector y de todo el mundo" es por el precio de las materias primas como el huevo o la mantequilla, cuyo precio se ha duplicado, mientras que en el caso del azúcar "se ha casi triplicado". También ha subido el valor del chocolate o la harina.

"En mi vida he conocido una cosa parecida", según Hernández, quien ha reconocido que hay algunos productos como el aceite de girasol viene de Ucrania y su subida puede tener justificación, pero ha señalado que ha aumentado el precio de "todo".

A este respecto, ha recordado que el sector de la pastelería artesana trabaja con material "de alta calidad y precio caro". El material "está escaseando y el precio está por las nubes", lamenta Hernández, quien subraya que, de media, todos los productos han subido un 50%.

En este sentido, Hernández ha reconocido que el sector va a perder dinero a algunos productos o no va a ganar "prácticamente nada" porque sus profesionales son "incapaces" de repercutir todos los costes a los clientes" y están haciendo un ejercicio de "moderación muy importante".

"Una tienda que consumía 800 euros de luz, ahora está pagando 2.100 o 2.300 euros por ejemplo", según Hernández, quien ha admitido que hay algunos costes que se pueden repercutir y otros no con el fin de "intentar mantener al cliente de toda la vida" porque las pastelerías artesanas "viven de la tradición y del consumidor de toda la vida, al que conocemos de una forma muy cercana".

En este sentido, ha afirmado que el sector aspira este año a "no perder" dinero. Así, ha reconocido que las ventas "están yendo bien" pero "no se le gana dinero al producto porque los costes se han disparado". De hecho, el sector ha detectado que el cliente "está volviendo al producto de alta calidad, que está ganando enteros" tras la pandemia.

"La gente pregunta mucho por la composición y evita las grasas saturadas e hidrogenadas que lleva toda la pastelería industrial", según Hernández, quien destaca que los clientes están volviendo desde las grandes superficies a las pastelerías de calidad. "Esa es la parte positiva y estamos muy contentos por ello", ha subrayado.