BARCELONA 30 Nov. (EUROPA PRESS) -
El secretario de organización del PSC, José Zaragoza, ha considerado este martes que la "alegría" que mostró el presidente del Congreso, José Bono (PSOE), por la victoria de CiU en las autonómicas demuestra su poca simpatía por el PSC.
"No me sorprendió la alegría del señor Bono apresurándose a felicitar al señor Mas. Es evidente que el señor Bono simpatía por los socialistas catalanes no tiene", ha afirmado en declaraciones a Catalunya Ràdio recogidas por Europa Press.
Pese a esta consideración, ha defendido que existe un buen entendimiento entre PSOE y PSC, aunque ha matizado que las diferencias surgen porque ambos partidos defienden proyectos políticos para "realidades políticas distintas".
"Podemos coincidir en cosas pero no somos iguales", ha sentenciado, y ha explicado que será en el próximo Congreso del PSC --previsiblemente en otoño de 2011-- cuando el partido decidirá si opta por tener un grupo propio en el Congreso.
Zaragoza ha reivindicado que, para defender los intereses de Catalunya, si el PSC ha tenido "conflictos" con alguien ha sido sobre todo con el Gobierno del PSOE.
UNA RENUNCIA POR "SORPRESA"
Zaragoza ha admitido que la renuncia al escaño del candidato socialista a la Generalitat, José Montilla, causó "sorpresa" en las filas del partido, pero ha negado que la dirección esté improvisando en su relevo.
Asimismo, ha asegurado que la elección del número 1 por Girona, Joaquim Nadal, como líder del grupo parlamentario socialista fue tomada por la "unanimidad" de la ejecutiva, incluida la número dos por Barcelona, Montserrat Tura.
El secretario de organización socialista ha recordado que el Congreso del PSC elegirá al próximo líder de la formación, pero ha reconocido que el partido contempla en sus estatutos la posibilidad de someter a primarias la elección de los candidatos a las elecciones, al ser preguntado por esta cuestión.
Pese a que el PSC ha obtenido los peores resultados en unas autonómicas, Zaragoza ha avalado el trabajo del jefe de campaña del partido que le relevó, Jaume Collboni, porque ha dado a la estrategia socialista "una creatividad y fuerza" que él no hubiera podido dar.