ARANJUEZ, 19 Jul. (EUROPA PRESS) -
El presidente de CiU, Artur Mas, anunció hoy que su formación apostará por responder a la sentencia del Tribunal Constitucional sobre el Estatut a través de vías que permitan que Cataluña "pueda decidir su futuro y avanzar hacia la autodeterminación".
Durante su intervención en los cursos de verano de la Universidad Rey Juan Carlos en Aranjuez (Madrid), Mas aseguró que ésta es la fórmula que CiU está empezando a adoptar en Cataluña tras la sentencia y añadió que, a su juicio, la primera "etapa" del proceso debe ser poner en marcha un sistema parecido al del concierto económico vasco por el que la comunidad pueda gestionar sus propios recursos.
El líder de CiU recordó que su formación siempre apostó por avanzar dentro del marco constitucional, pero lamentó que ahora se haya puesto límites al avance del autogobierno catalán dentro de la Carta Magna. "Estamos frente a una pared, se han tapiado las puertas y no hay ventanas. Avanzar hacia la autodeterminación es una vía que nosotros no habíamos puesto sobre la mesa y ahora es una posibilidad", explicó.
Según indicó, ese "derecho a decidir" para CiU "no tiene límite" y "puede llegar tan lejos como la sociedad catalana decida". "Que Cataluña decida --insistió--. Hay que ver una vía de concierto o convenio para gestionar sus recursos como primera escala, que llegará donde la sociedad catalana aspire".
Mas quiso dejar claro que este proceso, si está "pilotado" por CiU, será siempre "pacífico, democrático, sabiendo que hay sentimientos e intereses comunes entre Cataluña y el Estado y sin que la sociedad catalana quede fracturada internamente".
Para el candidato a la Generalitat, la sentencia del TC sólo dejó tres opciones a los catalanes: "aceptar el final del camino, que el Estado dé solución a este callejón sin salida o avanzar hacia la autodeterminación". Así, advirtió de que CiU nunca optará por la primera opción y también se mostró "escéptico" a que el Estado central "haga lo que debe hacer y proponga una solución".
Por ello, insistió en poner en marcha un concierto económico "que con el paso del tiempo pueda llegar a otros puntos". "Es una vía que la tenemos que contemplar porque tenemos la sensación de que por la vía tradicional no vamos a avanzar más. La alternativa sería quedarnos ahí, y eso es lo que no vamos a hacer", enfatizó.
Mas reconoció que CiU tiene una sensación de "fatiga" porque, según aseguró, "ha arrimado el hombro" en los momentos importantes para España, como cuando hace dos meses permitió en el Congreso que saliera adelante el plan de austeridad del Gobierno, y sin embargo siente que no es respaldada "a la hora de la verdad".
CUATRO AÑOS DE "SAINETE Y VODEVIL"
Pese a todo ello, reconoció que en un balance de los últimos 30 años de Estado autonómico el balance es "más positivo que negativo" porque "ha sumado mucho más que restado". "Es insuficiente y sin demasiado futuro, pero con un pasado solvente y una experiencia que ha merecido la pena", reconoció.
A su juicio, a esta situación se ha llegado tras cuatro años de "sainete y vodevil" en espera de una sentencia del Estatut con la que además el TC "ha hecho muy flaco favor a la perspectiva histórica de entendimiento entre Cataluña y el Estado". Además, lamentó que la sentencia haya sido finalmente "más política que jurídica" y auguró que esto se debe a que este es el clima que existe "en los centros de poder del Estado".
También quiso dejar claro que la sentencia, aunque "no se carga todo" el Estatut, sí que afecta a sus partes "vitales" porque altera puntos como la definición de nación, la lengua, los derechos históricos, las competencias, la financiación o las inversiones del Estado en Cataluña.
"Por primera vez en 30 años el Tribunal Constitucional nos está diciendo que las aspiraciones del pueblo catalán no caben en la interpretación que se hace de la Constitución, un corsé rígido y cerrado", lamentó.
REFORMA CONSTITUCIONAL
Por ello, reiteró que una de las salidas sería una reforma constitucional, pero adelantó que no será propuesta por CiU porque entonces estaría abocada al fracaso. "Ese camino lo tienen que proponer los partidos de ámbito estatal tras una reflexión de la situación creada. El problema subsiste y la herida está ahí", reflexionó.
Por todo ello, dado su "escepticismo" sobre las actuaciones del Estado, insistió en que como tercera vía sólo quedan los pasos hacia la autodeterminación y aseguró que el lema de la manifestación celebrada en Cataluña dejaba claro la defensa del "derecho a decidir".
A su juicio, en el resto de España no hay consciencia de lo que está pasando en Cataluña, donde existe "una corriente de fondo y un cabreo muy importante" que además "va cogiendo empuje y base" entre la sociedad.