El líder planteó introducir grandes cantidades de droga procedente de Sudamérica y Turquía
MADRID, 5 Oct. (EUROPA PRESS) -
La Audiencia Nacional (AN) ha impuesto entre 10 y 20 años de cárcel a siete personas como coautores de un delito agravado contra la salud pública por organización criminal al formar parte de una banda de narcotráfico ubicada en Barcelona y a la que la Policía le intervino el "mayor alijo" --311 kilos-- de heroína conocido en España, además de 1.558 kilos de cocaína disuelta en pulpa de fruta.
El valor de la heroína incautada asciende a 74,7 millones de euros de ser vendida por dosis; 12,2 millones por kilos y 31 millones por gramos, mientras que el precio de la cocaína fue tasado en 56 millones, según una sentencia recogida por Europa Press.
La AN ha decretado la máxima pena, 20 años de cárcel, para el líder de la banda, que manejaba los "contactos internacionales" para conseguir la cocaína y la heroína "en origen", captaba a los miembros que necesitaba y le asignaba funciones a cada uno.
Al menos desde 2016, el cabecilla organizó una "estructura personal y logística" para introducir, "a través de buques y aeronaves", "grandes cantidades de cocaína procedentes de Sudamérica y de heroína procedente de Turquía", unas sustancias que ocultaban en importaciones de productos desde esos países, "simulando operaciones comerciales existentes generalmente por vía marítima".
El líder de la organización criminal establecía el control y el contacto con los suministradores de las sustancias que pretendía introducir en España, para más tarde proceder a su distribución en el territorio de la Unión Europea, como en Bélgica o Alemania.
Uno de sus colaboradores, que hacía las tareas de transporte y descarga, puso una nave a disposición de la banda en un polígono industrial de Manresa (Barcelona) para ocultar los contenedores importados y poder manipular la mercancía para extraer la droga.
75 MILLONES DE MULTA
Otros miembros condenados también participaban en el transporte y seguridad de los estupefacientes hasta los lugares de entrega, mientras que otros hacían de intermediarios por su "contactos en el mundo de las drogas" de "personas interesadas" en comprarlas.
A los siete condenados, además de sus respectivas condenas de cárcel, los magistrados acuerdan que afronten una multa cada uno de 75 millones de euros. Además, al jefe de la banda la Audiencia le atribuye un delito agravado de tenencia ilícita de armas.
En una de las incautaciones, realizada en noviembre de 2017 en el Puerto de Barcelona, los agentes encontraron 252 kilos de heroína escondidos en cientos de bolsas escondidas en sacos de cemento. Una cantidad a sumar a otras intervenciones de más de 50 kilos.
Por aquellas fechas también se localizó en el Puerto de Buenaventura, en Colombia, 1.558 kilos de cocaína disuelta en pulpa de fruta que estaban ocultos en 120 bidones y dos contenedores. La droga no había salido porque se había pagado el precio de la pulpa.
