Ana Botella pide al Cristo de Medinaceli trabajo para todos los españoles

Actualizado: viernes, 2 marzo 2012 14:34

MADRID, 2 Mar. (EUROPA PRESS) -

La alcaldesa de Madrid, Ana Botella, ha visitado este viernes la Basílica de Jesús de Medinaceli y ha señalado que le ha pedido al Cristo "trabajo para todos los españoles".

En el día grande de Jesús de Medinaceli, decenas de personas han guardado cola para acceder al interior del templo con el objetivo de cumplir con la tradición de acudir el primer viernes de marzo a la basílica madrileña a venerar la imagen del Cristo.

Los fieles han esperado durante horas para proceder a besar el pie derecho de la imagen y pedir por familiares y amigos como marca la tradición, que se remonta al siglo XVII.

Una de las devotas que guardaba fila en la puerta de la Basílica ha indicado que este año "se ha acercado más gente que otros años porque hay más parados". Además, ha señalado que de todas formas, ella viene todos los años porque "el fervor de este Cristo es una tradición".

La mayoría de los fieles coincidían en que lo que le iban a pedir al Cristo es salud, trabajo y sobre todo salir de la crisis económica. La iglesia no cerrará hasta que todos los visitantes hayan entrado.

UNA IMAGEN CENTENARIA

La imagen de Nuestro Padre Jesús Nazareno pertenece a la Escuela Sevillana del taller de Juan de Mesa o alguno de sus discípulos. Fue tallada en la primera mitad del siglo XVII en Sevilla y llevada por los Capuchinos a la plaza fuerte de Mehdía o Mámora (Marruecos), para culto de los soldados españoles.

En abril de 1681 cae prisionera de los moros, la arrastran por la calle de Mequinez y la rescatan los trinitarios, llegando a Madrid en el verano de 1682, donde llega con fama de milagrosa. Ese mismo año se organiza la primera procesión a la que se dice asiste el "todo Madrid", pueblo fiel, nobleza y casa real.

Desde entonces todos los años, en la gran romería del primer viernes de marzo, asiste algún miembro de la Familia Real a rezar al Nazareno. Debido a diversos avatares históricos, la imagen ha recorrido varias iglesias de Madrid y en los años de la Guerra Civil fue trasladada a Valencia, Cataluña y Francia, para terminar en Ginebra (Suiza), junto con todo el tesoro artístico español en una gran exposición de arte en el Palacio de la Sociedad de Naciones.

Terminada la Guerra Civil, regresa a su iglesia de la plaza de Jesús, en Madrid, donde es visitada permanentemente por sus fieles y seguidores.