PALMA DE MALLORCA, 15 Mar. (EUROPA PRESS) -
El letrado Juan Luis Matas aseguró que el ex alcalde de Andratx, Eugenio Hidalgo y su defendido, el ex celador de obras del municipio, Jaume Gibert, no saldrán hoy de prisión porque la Fiscalía no ha registrado ninguna petición de libertad sobre ninguno de los dos acusados y, en caso de hacerlo, dicha solicitud tendría que ser revisada mañana por el juez instructor del caso, Álvaro Latorre.
En declaraciones a Europa Press, Matas precisó que esta mañana mantuvo contactos con el Fiscal Anticorrupción, Joan Carrau, y con el magistrado del Juzgado de Instrucción número 12 de Palma, Álvaro Latorre, quienes le confirmaron que no hay petición ni auto alguno de libertad para ninguno de los dos imputados.
Fuentes judiciales confirmaron a Europa Press que la Fiscalía no ha solicitado a lo largo del día de hoy petición alguna de libertad para los imputados, aunque precisaron que en caso de ser registrada, habría de ser resuelta mañana por el juez Latorre. Si el juez Latorre dictase un auto de liberad a petición de la Fiscalía, la salida de prisión de ambos imputados se llevaría a cabo en horas posteriores.
Por su parte, Matas recordó que el dictamen de la Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Palma obliga a Hidalgo y Gibert a permanecer en la cárcel hasta el próximo 31 de marzo y recordó que sólo saldrán antes de la fecha por orden del juez Latorre y a petición del fiscal Carrau aunque, según el abogado, "por el momento y menos en el día de hoy, ninguno de los dos acusados abandonará la Prisión de Palma".
El ex primer edil de Andratx y el ex celador de Obras permanecen en la Prisión Provincial de Palma desde el pasado 1 de febrero, después de que la Sección Segunda de la Audiencia Provincial de Palma resolviera el 31 de enero estimar el recurso de apelación interpuesto por el fiscal Anticorrupción contra el auto judicial del pasado 13 de diciembre, mediante el cual, el magistrado Latorre dejó a ambos imputados en libertad provisional bajo fianza de 100.000 y 60.000 euros, respectivamente, al considerar que no existía riesgo de fuga ni de destrucción de pruebas.
