La AVT se opone a la excarcelación de De Juana y pide que se le vuelva a alimentar de forma forzosa si empeora

Actualizado: martes, 23 enero 2007 19:04

El informe médico señala que pesa 53,7 kilos y que "de persistir en su actitud" de no probar bocado puede morir o sufrir graves secuelas

MADRID, 23 Ene. (EUROPA PRESS) -

La Asociación Víctimas del Terrorismo (AVT) ha remitido hoy un escrito a la Sección Primera de lo Penal de la Audiencia Nacional en la que se opone a la libertad provisional o a la aplicación de medida alguna que "atenúe" la actual situación penitenciaria de etarra José Ignacio de Juana Chaos, actualmente en huelga de hambre e ingresado en el Hospital Doce de Octubre de Madrid, se informó a Europa Press en fuentes de la asociación.

En el informe médico, remitido ayer a la Audiencia Nacional por la Unidad de Nutrición Clínica del hospital, se señala que De Juana, a quien se dejó de alimentar forzosamente el pasado 7 de enero, pesa actualmente 53,7 kilos y que, de persistir en su actitud de no ingerir alimento, podría sufrir "a medio plazo una situación irreversible con resultado de muerte o graves secuelas".

Tampoco se descarta la posibilidad de una "muerte súbita, no prevenible a pesar de los controles realizados" según el documento, al que ha tenido acceso Europa Press. Si sigue sin querer comer, dicen los médicos, "se hará necesario reiniciar la administración de nutrición enteral por sonda nasogástrica con objeto de preservar su vida".

"CHANTAJE PROCESAL"

La AVT, personada como acusación particular en la causa contra De Juana, en la que fue condenado a 12 años y 7 meses de cárcel por un delito de amenazas terroristas, considera que su precario estado de salud es creado por el propio interno a modo de "chantaje procesal", para convertirse en un "mártir de la izquierda abertzale" por lo que, de aplicarse alguna medida, debe ser la de alimentación forzosa del reo.

En su escrito, la AVT recuerda que la condena por amenazas está pendiente de confirmación por el Tribunal Supremo, que podría incluso aumentar la condena inicial según el escrito de casación presentado por esta parte. Subraya también que De Juana haya sido condenado por 25 asesinatos y otros delitos conexos cometidos en nombre de ETA.

Asimismo, el escrito destaca que el terrorista nunca se ha arrepentido y que se corre el riesgo que, de obtener finalmente su excarcelación, su actitud de privarse de alimento para obtener la libertad sea imitada por otros miembros de la organización terrorista.

INFORME MÉDICO QUE PIDIÓ EL TRIBUNAL.

El informe médico está firmado por el Jefe de la Unidad de Nutrición Clínica y dos médicos adjuntos, y ha sido realizado en respuesta de la petición de información que realizó el tribunal el pasado viernes. Señala que las publicaciones científicas sobre personas sanas que voluntariaente deciden iniciar una huelga de hambre son escasas, aunque hay estudios que fijan la muerte tras 8 ó 10 semanas de ausencia absoluta de alimentación.

Tras relatar los antecedentes personales de De Juana Chaos, los médicos señalan que el preso ingresó en el Hospital el pasado 24 de noviembre pesando 63 kilos y refiriendo que no tomaba alimento desde 18 días antes. Al inicio de este segundo periodo de huelga de hambre -el primero lo mantuvo 63 días entre agosto y octubre del año pasado-, el preso pesaba 71 kilos, y su altura es de 172,5 centímetros.

El 28 de noviembre del año pasado, y ante las alteraciones electrocardiográficas que presentaba, se indicó al paciente la necesidad de ingerir suplemento de potasio, lo que De Juana aceptó. A la vista de su deterioro clínico, y en cumplimiento del auto emitido por la Audiencia Nacional, se le comenzó a alimentar por onda nasogástrica el 11 de diciembre.

En ese momento, el terrorista pesaba 57,5 kilos, es decir, había perdido el 18 por ciento de su peso desde el inicio de la huelga de hambre y el 37 por ciento en relación al peso previo al comenzar su protesta. El día 7 de enero, fecha en la que se le retiró la sonda, De Juana había recuperado 5 kilos.

"MOTIVOS LEGALES".

Desde ese momento, según señala el informe médico, De Juana se niega a tomar ningún tipo de tratamiento por vía oral y ningún tipo de alimento, y la presencia de hipopotasemia ha hecho necesaria la reintroducción de suplementos de potasio. "El paciente manifiesta repetidamente que no va a volver a alimentarse de forma voluntaria hasta que no se resuelvan los motivos legales que le han llevado a reiniciar la huelga de hambre", dice el informe.

Concluyen que de persistir De Juana en su actitud "hay un alto riesgo de producirse un proceso de deterioro progresivo en relación no sólo a la ausencia de alimentación voluntaria, sino al propio proceso de ayuno-realimentación no fisiológico y a las medidas de contención que se hayan de tomar ante la falta de colaboración del paciente en el proceso terapéutico".

Todo ello puede condicionar, "a pesar de las estrechas medidas de seguimiento y tratamiento que se han tomado y las que se pueden tomar en un futuro, a medio plazo, una situación irreversible con resultado de muerte o graves secuelas", finaliza el informe.