MADRID 27 Ene. (EUROPA PRESS) -
La portavoz del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), Gabriela Bravo, lamentó hoy que el PP haya planteado el debate sobre la instauración de la cadena perpetua "al calor de dramas humanos", como es el aniversario de la desaparición de la joven sevillana Marta del Castillo, y afirmó que "no tenemos que postular estados de derecho vengativos".
En declaraciones a Europa Press, Bravo señaló que cualquier reforma debe debatirse "con la seriedad, prudencia y tranquilidad necesaria en los ámbitos adecuados", como sería en este caso el Parlamento.
Sin citar en ningún momento al presidente del PP andaluz Javier Arenas, que fue quien planteó el pasado domingo la posibilidad de aplicar en España la cadena perpetua "revisable", Bravo argumentó que "no tiene que aprovechar nadie los dramas humanos como son las muertes, las agresiones sexuales contra las menores o aniversarios de fallecimientos, por muy doloroso que resulte, para hacer propuestas".
Además, indicó que este debate lleva a plantearnos "qué tipo de Estado de Derecho queremos" y recordó que la Constitución configuró "una sociedad democrática avanzada, donde el Derecho Penal debe buscar la reinserción y la reeducación en el ámbito de las penas".
Insistió en que la cadena perpetua, aunque sea en su modalidad "atenuada", como plantea el PP ,"no tiene encaje en el marco de la Constitución, ni siquiera previendo la posibilidad de su revisión".
A su juicio, "la indeterminación de una pena encaja mal con un derecho penal humanitario" con los fines que marca la Carta Magna, "por lo que este debate creo que debería realizarse desde otro ámbito y otra reflexión".
REFORMA LEY DEL MENOR.
Sobre otra reforma penal planteada hoy por los populares, en el sentido de que los menores con delitos graves, como violaciones o asesinatos, ingresen en prisión al cumplir los 18 años, Bravo recordó que la última reforma de la Ley del Menor ya contempla este supuesto.
Dicha reforma, que entró en vigor a principios de 2007, prevé ya la posibilidad de que los menores condenados que estén cumpliendo la medida en un centro, una vez alcanzada la mayoría de edad, "en el caso de que no cumplieran los objetivos previstos en la sentencia, y oídas las partes, puedan cumplir su pena en un centro penitenciario si así lo acuerda el juez", explicó.
"No se está aportando nada nuevo, salvo que se quiera aplicar de forma automática, sin tener en cuenta si quiera si los menores están asimilando los fines educativos de las medidas", concluyó.