El británico reclamado por EEUU rechaza ser extraditado voluntariamente por la estafa de los coworking 'Bar Works'

Fachada de la Audiencia Nacional, a 22 de mayo de 2023, en Madrid (España). Unos 45.000 funcionarios de la administración de Justicia comienzan hoy su huelga indefinida para exigir mejoras salariales y laborales, tras más de un mes de movilizaciones pun
Fachada de la Audiencia Nacional, a 22 de mayo de 2023, en Madrid (España). Unos 45.000 funcionarios de la administración de Justicia comienzan hoy su huelga indefinida para exigir mejoras salariales y laborales, tras más de un mes de movilizaciones pun - Eduardo Parra - Europa Press
Publicado: martes, 6 junio 2023 12:58

MADRID, 6 Jun. (EUROPA PRESS) -

El británico reclamado por EEUU a España por haber participado presuntamente en organizar una estafa piramidal con el cebo de la compra de espacios de trabajo compartido --coworking-- se ha negado ante la Audiencia Nacional a ser extraditado voluntariamente y su defensa ha pedido que el asunto se lleve en España puesto que los inversores afectados hacían los abonos de dinero en una cuenta radicada en Marbella que pertenecía a una empresa española.

David Andrew Kennedy, que ha renunciado a hacer uso de la palabra en la vista de extradición, habría participado --según la Fiscalía-- en esta presunta estafa desde España, donde reside, y logró engañar a unos 100 inversores con la venta por internet de esos espacios de trabajo de una compañía que se ubicaba en Delaware (EEUU) denominada 'Bar Works'.

Según indica el escrito del Ministerio Público, recogido por Europa Press, desde 2015 y hasta 2017 el reclamado y sus cómplices captaron inversores para esa compañía cuyo propietario y controlador principal era Renwicck Haddow.

Este martes, la defensa de Kennedy se ha ratificado en sus alegaciones a la extradición y han defendido que la competencia territorial es de España y no de EEUU porque ni su defendido ni si empresa, United Property Group, han tenido relación con la creación de 'Bar Works'.

Así, ha enfatizado que los hechos se le imputan a un residente comunitario español, con empresa española, y apunta que no existe ningún perjudicado por las presuntas acciones de Kennedy que viva en EEUU.

Por otro lado, ha argumentado que dado que es residente en España desde 2010 y por tanto en 2020, cuando se produce el Brexit, ya residía aquí el Reino Unido puede reclamarle mediante extradición. Señala así que subsidiariamente a la cuestión de la competencia española, solicita que se aplique la conocida como 'doctrina Petruhin' y se pregunte a Reino Unido si le interesa reclamarlo.

La fiscal ha insistido en que es procedente la extradición a EEUU porque los locales ofertados se encontraban allí, y porque aunque la participación de Kennedy se produce desde España, la parte principal de la estafa se llevaba a cabo en EEUU, donde consta la sede de la compañía.

Insiste en que EEUU está en mejor posición para conocer del asunto, máxime teniendo en cuenta la multitud de nacionalidades de los afectados. Y ha añadido que la 'doctrina Petruhin' no debe aplicarse en este caso porque se encuentra pendiente de resolución la cuestión prejudicial de un caso similar y en el caso de Kennedy no se dan las condiciones necesarias.

LA ESTAFA DE 'BAR WORKS'

En esta estafa piramidal, los inversores, unos 800 en todo el mundo, colocaron en esa compañía hasta 57 millones de dólares, y el sistema les permitía arrendar esos espacios de trabajo de 'Bar Works' y les aseguraba una ganancia del 14 al 16% cada año.

Para obtener ese arrendamiento de espacio de trabajo individual, pagaban entre 22.000 y 30.000 dólares. Esto les daba pie a subarrendar ese mismo espacio a un afiliado de la compañía, y así se garantizaban una tarifa mensual de alquiler. La compañía prometía el reintegro total de la inversión en 10 años.

La Fiscalía explica que en realidad 'Bar Works' funcionó con un esquema de engaño piramidal porque pagaba a los inversores con el dinero que captaba de otros nuevos. Señala que finalmente esa pirámide "colapsó" en 2017 y ocasionó millones de dólares en pérdidas.

Apunta el Ministerio Público que 'Bar Works' indicaba en sus documentos que el director general era Jonathan Black, que en realidad era una identidad ficticia para ocultar la participación de Renwicck Haddow como fundador dado que tenía antecedentes negativos y estaba inhabilitado en Reino Unido por esquemas previos de inversiones.

Kennedy y Haddow se dedicaron a reclutar a agentes para vender esos contratos de arrendamiento y les proporcionaron esos documentos de oferta que contenían la información falsa. En España, la organización captó por medio de la sociedad United Property Group más de 100 inversores que se dejaron aproximadamente 7,5 millones de dólares en ese negocio.

Según recuerda el fiscal, consta en la investigación que en una cuenta controlada por Keneddy y otro cómplice se recibió más de 2 millones de dólares en concepto de comisiones recibidas de 'Bar Works', fondos que fueron movidos a otras cuentas asociadas.

EN PRISIÓN PROVISIONAL

El Ministerio Público señala que Kennedy fue detenido en noviembre de 2022 en Marbella (Málaga) tras recibir la orden internacional de detención expedida por las autoridades judiciales de EEUU y que desde entonces permanece en prisión provisional. Los delitos por los que le reclaman son los de fraude y pertenencia a organización criminal.

Apunta que se cumplen los requisitos para su extradición ya que los hechos no han prescrito, no hay una motivación política para la extradición, la pena que se contempla para los delitos supera el año de prisión y se da el principio de doble incriminación --que los delitos por los que es perseguido existan también en España--.