PAMPLONA, 15 Oct. (EUROPA PRESS) -
Alrededor de un centenar de personas homenajearon hoy en Pamplona, en un acto convocado por la plataforma Libertad Ya, a cinco víctimas de ETA asesinadas hace 25 años. En concreto, los asistentes recordaron a Jesús Alcocer, Juan José Visiedo, Tomás Palacín, José Luis Ollo y Diego Torrente, todos ellos asesinados a manos de la banda terrorista en el año 1984.
El acto cívico, que se celebró bajo el lema 'Contra ETA. Libertad ya' a partir de las 20 horas junto al monumento a las víctimas del terrorismo de la plaza Baluarte, contó con la presencia del presidente del Gobierno de Navarra, Miguel Sanz; el consejero de Presidencia, Justicia e Interior, Javier Caballero; el secretario general del PSN, Roberto Jiménez, y diferentes parlamentarios regionalistas y socialistas.
Además, estuvieron presentes diferentes miembros del Partido Popular de Navarra como José Ignacio Palacios o el eurodiputado del PPN, Pablo Zalba, además de concejales regionalistas del Consistorio pamplonés y vecinos de la capital navarra.
Tras la lectura de un manifiesto por parte del miembro de 'Libertad Ya' Patxi Mendiburu en el que se destacaba que estos cinco asesinados a manos de ETA "sacrificaron su vida a proteger nuestras libertades', Salvador Ulayar, hijo de Jesús Ulayar, asesinado por ETA en 1979, hizo entrega a las hijas de Jesús Alcocer, una de las cinco víctimas homenajeadas, de un obsequio como muestra de que la ciudadanía navarra "se sigue acordando de todas las víctimas del terrorismo".
Por su parte, el presidente del Gobierno de Navarra, Miguel Sanz, puso de relieve que este homenaje es un acto "muy emotivo" y "entrañable" que demuestra que las cinco personas asesinadas en el año 1984 "permanecen vivas en la memoria de todos aquellos que creemos en la libertad y la justicia".
El jefe del Ejecutivo foral destacó, en declaraciones a los medios tras la celebración del homenaje, que "aquellas personas que probablemente cuando fueron asesinadas en su día por ETA no tuvieron el reconocimiento adecuado como merecía su sacrifico, hoy sus familiares pueden verse reconfortados porque ven que la sociedad les sigue recordando y apoyando".
En opinión de Miguel Sanz, la sociedad "sigue firme para luchar contra esta lacra que nos azota y que cada día pone más en riesgo nuestro régimen de libertad".
