El CGPJ no ve tacha disciplinaria en un juez del TS acusado de asesorar a Urdangarín

Actualizado: miércoles, 7 octubre 2015 11:01

MADRID, 7 Oct. (EUROPA PRESS) -

El promotor de la Acción Disciplinaria del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), Antonio Jesús Fonseca Herrero, ha archivado la investigación que abrió el pasado mes de abril sobre el asesoramiento que pudo prestar el magistrado del Tribunal Supremo Ángel Aguallo al marido de la Infanta Cristina, Iñaki Urdangarín, una actividad de la que se le acusa en varios correos electrónicos aportados al "caso Nóos" por el socio del exduque de Palma Diego Torres.

El archivo de las pesquisas, que se produjo antes del verano, obedece a la no constatación de la existencia de una actividad de asesoría por parte de este magistrado a Urdangarín, por lo que no puede atribuirse a éste ninguna conducta que merezca sanción disciplinaria según la Ley Orgánica del Poder Judicial (LOPJ), han informado a Europa Press fuentes del órgano de gobierno de los jueces.

El Promotor disciplinario verificó la existencia de los citados correos aportados por Torres y analizó su contenido para comprobar si los hechos, ocurridos en 2008 según la documentación aportada podían ser objeto de alguna actividad prohibida a los jueces, lo que no ha podido acreditarse.

Según estos correos, el magistrado del Tribunal Supremo Ángel Aguallo, entonces letrado del Tribunal Constitucional, asesoró al Duque en relación a uno de los negocios por los que éste cobró a través de la empresa Aizoon -cuya propiedad comparte con la Infanta Cristina- para defraudar a Hacienda.

En uno de los emails, de febrero de 2008, la secretaria de Urdangarin, Julita Cuquerella, pregunta a Aguallo: "¿Sería tan amable de comunicarme el lugar de la reunión-almuerzo, con D.Iñaki y con el Sr.Torres del próximo día 25 de 13:30 a 16:00?", a lo que el magistrado le responde en otro correo: "Creo que va a ser en la propia sede de Pernod Ricard".

Precisamente, Pernod Ricard es una de las empresas de las que cobró el Duque por diversos asesoramientos y cuyas retribuciones facturó, como si de ingresos por actividades profesionales se tratase, a través de Aizoon, con el objetivo de tributar menos en su declaración de la renta. Mediante este sistema, Urdangarin habría defraudado hasta un total de 337.138 euros en las cuotas del IRPF correspondientes a los años 2007 y 2008.