Condenadas a 17 años de cárcel dos prostitutas por matar a un empresario andorrano en Granollers (Barcelona)

Actualizado: jueves, 5 julio 2007 22:55

BARCELONA, 5 Jul. (EUROPA PRESS) -

La Audiencia de Barcelona ha condenado a 17 años y medio de cárcel a Tetyana K. y Olena P., las dos prostitutas de origen ruso que en febrero de 2004 mataron a martillazos a un empresario andorrano en Granollers (Barcelona) con la ayuda del ex novio de una de ellas, Oleksanr L., a quien se le ha impuesto la misma pena.

Un tribunal popular declaró culpables a los tres procesados de un delito de asesinato con alevosía a finales de mayo, pero declaró inocentes a José T.S., que en el momento de los hechos era amante de Tetyana K., y a José María F.C., un conocido de las dos prostitutas, quienes se enfrentaban a dos años de cárcel por presuntamente proporcionar una coartada falsa a las acusadas.

Además de la pena de prisión, la sentencia obliga a los condenados a indemnizar conjuntamente con un total de 47.000 euros a los dos hijos de la víctima por los daños morales que les ha provocado el asesinato de su padre, Joan C.M., de 60 años y vecino de L'Ametlla del Vallès, en el domicilio que tenía alquilado en Granollers para sus contactos sexuales don Tetyana K.

Los hechos se remontan a la medianoche del 10 de febrero de 2004, cuando el empresario salió de un conocido restaurante de la localidad en compañía de las hermanas Tetyana K. y Olena P. para dirigirse con ellas al piso que tenía alquilado en Granollers y en el que éstas vivían desde hacía unos días.

Una vez allí, la víctima, viudo desde hacía unos meses, se quedó dormido a causa del abundante alcohol que había consumido. Las prostitutas aprovecharon entonces para poner en práctica el plan que habían urdido para quedarse con las pertenencias del empresario, entre ellas, los 81.227 euros que había obtenido de la venta de una finca y que guardaba en casa.

Las procesadas dejaron entrar en la vivienda a Oleksandr. L., quien portaba un martillo, y, acto seguido, uno de ellos golpeó por la espalda a Joan C.M. en la cabeza, causándole una fractura craneal con pérdida de masa encefálica y una gran hemorragia que provocó su muerte por fallo cardiorrespiratorio. Su cadáver fue hallado el 13 de febrero en el maletero de su coche, abandonado en un polígono industrial de Granollers.

El jurado no pudo "definir con exactitud" cuál de los tres procesados dio el golpe mortal, pero tuvo claro que el crimen se cometió con alevosía, ya que los acusados agredieron a la víctima "aprovechando que no podía defenderse eficazmente porque tenía sus facultades seriamente disminuidas". Joan C.M. estaba ebrio, tenía 3,5 gramos de alcohol en sangre, y se había tomado un fármaco contra el insomnio que tenía efectos "hipnóticos".