VITORIA, 25 Abr. (EUROPA PRESS) -
La modificación de la Ley de elecciones al Parlamento vasco que incluye la reforma de la Ley de Partidos estatal que establece la inhabilitación de cargos electos si, tras las elecciones, una sentencia judicial firme declara ilegal a su partido, continúa su tramitación en la Cámara vasca.
La devolución del texto al gobierno planteada por EA, ha sido rechazada este miércoles por PSE, PP y UPyD, la abstención del PNV y el apoyo de Aralar, EA y Ezker Anitza.
El consejero de Interior, Rodolfo Ares, ha presentado el proyecto de Ley de la quinta modificación de la Ley de Elecciones al Parlamento vasco que tiene como objetivo fundamental actualizar la actual ley en vigor que data del año 1990.
Según ha explicado, los cambios más importantes persiguen adecuar esta ley a la nueva realidad e incluir las reformas incluidas en la Ley orgánica de régimen electoral general. Asimismo, ha explicado que este proyecto de ley introduce las reformas necesarias para "conseguir una máxima seguridad en le proceso electoral, mayor eficacia y rapidez en el desarrollo de la votación en las mesas electorales".
"El proyecto pretende adecuar la vigente ley de elecciones al Parlamento vasco a la realidad y normativa de aplicación general y adaptar los artículos de la ley vasca a los recientes acuerdos adoptados por el Tribunal Constitucional", ha insistido.
Ares ha señalado que se trata de "mejorar" un texto legal con medidas como la limitación de campañas institucionales por parte de los poderes públicos en periodo electoral, la prohibición a las candidaturas de difundir propaganda en precampaña electoral, la clarificación de casos de voto nulo, favorecer la participación de personas con incapacidad auditiva, entre otras. "En definitiva se trata de poner en marcha una serie de modificaciones que mejoran la ley y permite conseguir todos estos objetivos", ha insistido.
Por otro lado, ha señalado que las novedades incluyen la incompatibilidad sobrevenida por la que se establece que "no podrán concurrir formaciones políticas declaradas ilegales por sentencia firme". El consejero ha subrayado que la voluntad del Gobierno vasco es que esta modificaciones se puedan "no solo discutir sino mejorar en trámite parlamentario", ya que "cualquier modificación de nuestra legislación electoral se debe hacer buscando el máximo consenso y respaldo de todas la fuerzas políticas".
El parlamentario de EA, Juanjo Agirrezabala, ha defendido su enmienda a la totalidad a la modificación del texto legal, argumentando que se trata de una modificación que "restringe derechos democráticos básicos como el derecho tanto al sufragio pasivo como el activo".
"Es necesario normalizar la vida política y para ello todos debemos poder participar en igualdad de condiciones sin candidaturas anuladas e ilegalizadas, sin vulnerar derechos democráticos fundamentales", ha defendido.
Ninguno de los grupos ha querido participar en el debate y han utilizado el turno de explicación de voto para explicar sus posturas. El parlamentario del PNV Mikel Iturrate, cuyo grupo se ha abstenido en la votación, ha recordado que los 'jeltzales' siempre se han mostrado en contra de la Ley de Partidos, al considerar que "vulnera" un derecho básico como el de la participación política.
Desde el PSE-EE, Miren Gallastegui, ha considerado que la enmienda de EA es "extemporánea", debido a la nueva situación generada con el "cese definitivo" del terrorismo anunciado por ETA. Además, la ha calificado de "incongruente", dado que Sortu -marca de la izquierda abertzale cuya legalización está en manos del Tribunal Constitucional- se comprometió a respetar la legalidad vigente en sus estatutos.
GARANTIAS FRENTE A LOS ASESINOS
El portavoz del PP en el Parlamento vasco, Antón Damborenea, ha asegurado que la Ley de Partidos "tiene y tendrá sentido" porque ofrece "garantías" al sistema democrático "frente a los asesinos". En este punto, ha recordado que, a pesar del cese de su actividad terrorista, ETA "no ha desaparecido".
El parlamentario de Aralar, Dani Maeztu, ha recordado que su formación se ha mostrado contraria a las ilegalizaciones de partidos, "no solo de forma teórica sino que también en la práctica siendo el único partido que ha renunciado a varios cargos fruto de la ilegalización de otras formaciones".
El parlamentario de Ezker Anitza, Mikel Arana, por su parte, ha expresado su oposición "radical" al considerar que se trata de una legislación 'ad hoc' que no debería tener espacio en el ordenamiento jurídico y porque "las opciones políticas conniventes con la violencia debería ser rechazas por los ciudadanos, no por legislaciones más o menos adaptadas a los intereses de determinado gobierno".
"Creemos que la ley de partidos ha empobrecido la calidad democrática del ordenamiento jurídico; si estamos en este nuevo tiempo es porque ETA ha tenido que resignarse porque sus crímenes solo estaban respaldados por cuatro fanáticos", ha indicado.
Finalmente, el parlamentario de UPyD, Gorka Maneiro, ha explicado que ha presentado una serie de enmiendas parciales al proyecto de ley y ha rechazado la devolución del proyecto al considerar "disparatada" la propuesta de EA que habla de "restricción de derechos democráticos básicos" cuando los cambios introducidos son "imprescindibles para debilitar a ETA y a sus satélites".