El coronel jefe de Asturias defiende que la trama de explosivos de Avilés se investigó adecuadamente

Actualizado: martes, 8 mayo 2007 20:33


MADRID, 8 May. (EUROPA PRESS) -

El coronel jefe de la zona de Asturias de la Guardia Civil, que comprende las Comandancias de Gijón y Oviedo, Pedro Laguna, aseguró hoy que ordenó que la investigación sobre tráfico de explosivos en Avilés fuera llevada por Oviedo con el apoyo de Gijón y defendió que las confidencias de Francisco Javier Fernández, conocido como "Nayo", Lavandera y el acusado Rafa Zouhier desembocaron en la creación de equipos dedicados a realizar averiguaciones.

"Se realizó una intervención, se crearon equipos destinados a investigar. ¿Eso no es intervenir?", espetó al abogado defensor del asturiano Raúl González Peláez, Endika Zulueta.

El alto mando de la Guardia Civil que precisó que desconoce "los entresijos de la investigación" ya que se limitaba "a despachar" con el teniente coronel Fernando Aldea, especificó que el responsable de Policía Judicial de Gijón le informó de la existencia de la Operación Serpiente abierta tras los datos ofrecidos por Lavandera sobre José Emilio Suárez Trashorras y Antonio Toro.

Así, explicó que los dos tenientes coroneles responsables de cada Comandancia son "profesionales" e "independientes" mientras de su cargo como jefe de zona es "un mando de dirección, de control y de coordinación".

En cuanto al testigo protegido el coronel apuntó que Lavandera les engañaba "contínuamente" y que le dijeron que el día que tuviera los explosivos "llamara". Dijo, además, que la cinta grabada con las declaraciones de Lavandera carecía según Gijón de valor judicial.

Añadió que en el mes de junio de 2003 le informaron de que no se había logrado sacar nada de la investigación sobre explosivos y que iban a derivar las pesquisas a la vía de las drogas.

En cuanto a la UCO explicó que cuando le comunicaron que dos agentes de la Unidad Central Operativa iban a desplazar a Asturias en relación a otras confidencias --en este caso de Rafa Zouhier-- sobre Toro Y Trashorras, dijo a sus hombres: "Ya sois más a trabajar".

Por su parte, el Jefe de la Comandancia de Gijón, José Antonio Rodríguez Bolinaza, se refirió en concreto a las confidencias de Lavandera, ofrecidas a un agente de su zona y grabadas en una cinta.

Rodríguez Bolinaza indicó que los datos ofrecidos por éste estaban relacionados con la Operación Pipol llevada a cabo por la Policía Nacional por lo cual investigó que no existieran nuevos datos de importancia y al constatar que no era así cerró la investigación.

El testigo declaró que existe una sanción administrativa en su contra abierta por la Guardia Civil en relación a la desaparición durante un largo periodo de tiempo de la cinta con la grabación de las confidencias.

En cuanto a la relación de estas con la información ofrecida en Oviedo por "Nayo" indicó que la Comandancia de esta provincia se limitó a pedir colaboración que "se les ofreció toda la posible". Reconoció, además, que se enteró de la existencia de estas nuevas confidencias sobre tráfico de explosivos en Avilés "a travñes de la prensa".

PADRE DE LOS MOUSSATEN

Además prestó declaración ante el tribunal el padre de los hermanos Mohamed y Brahim Moussaten que indicó que sus hijos no tienen relación alguna con movimientos islamistas radicales y que nunca les escuchó hablar de viajar a Irak con objeto de llevar a cabo la yihad. Defendió también la inocencia de su hermano, el acusado Youssef Belhadj y aseguró que "no es de Al Qaeda".