Economía/Macro.- (Ampliación) El Banco de España estima que el PIB creció en torno al 4% en el primer trimestre

Fernández Ordóñez afirma que la subida de tipos favorecerá una moderación del crédito hipotecario y del sector inmobiliario

MADRID, 24 Abr. (EUROPA PRESS) -

El gobernador del Banco de España, Miguel Ángel Fernández Ordóñez, afirmó hoy que los datos disponibles apuntan a que el crecimiento del PIB en el primer trimestre fue "muy parecido" al registrado en el último trimestre de 2006, cuando la economía española creció a un ritmo del 4% en tasa interanual.

Durante su comparecencia en la Comisión de Economía del Congreso, Fernández Ordóñez dijo que no se ha producido, por tanto, la desaceleración que se esperaba, y que tanto los datos de empleo como los de exportaciones indican que el crecimiento del PIB ha seguido en el primer trimestre las mismas pautas que en la última parte del pasado año.

No obstante, precisó que pese a que todavía no hay síntomas de desaceleración, a lo largo de este ejercicio se producirá una moderación del PIB, hasta colocarse en tasas más cercanas a su crecimiento potencial, que situó en un porcentaje superior al 3%, y añadió que se producirá "un menor peso relativo" del consumo privado y la inversión residencial y "una mayor contribución" de los bienes de equipo y de las exportaciones netas.

Fernández Ordóñez enmarcó esta evolución de la economía española en el endurecimiento de la política monetaria del Banco Central Europeo (BCE) aplicada a partir de 2005, como consecuencia de la recuperación de la zona euro y de las "intensas alzas" del precio del crudo, "que hacían presagiar que si no se actuaba convenientemente comenzarían a aparecer presiones sobre la inflación y los salarios".

El incremento de los tipos de interés desde el 2% en diciembre de 2005 hasta el 3,75% en la actualidad ha resultado, según Fernández Ordóñez, "muy beneficioso y enormemente positivo" para Europa en general y para España en particular, dado que este endurecimiento de la política monetaria le ha permitido mantener "ancladas" las expectativas de inflación y no le ha impedido seguir creando empleo (el 40% de los 13 millones de puestos de trabajo creado en Europa desde 1998).

CONDICIONES MONETARIAS HOLGADAS.

Aunque admitió que las condiciones monetarias de los últimos años han sido para España "demasiado holgadas" teniendo en cuenta su dinamismo, añadió que las ventajas de esta política han superado "con mucho" los posibles "desajustes" de sus condiciones particulares.

"Un tono menos relajado de la política monetaria se habría ajustado mejor a nuestras necesidades, pero con dicha política las posibilidades de que la economía europea se recuperara habrían sido menores y, con ello, más improbable que España hubiera mantenido sus tasas de crecimiento", añadió el gobernador, quien además apuntó que esta holgura de los tipos de interés se ha compensado con el mantenimiento de la estabilidad presupuestaria.

Dicho esto, abundó en el argumento reiterado por parte del Banco de España de que el endurecimiento de la política monetaria permitirá "encauzar" el patrón de gasto de familias y empresas hacia pautas "más sostenibles" y mejorar así la competitividad española.

MODERACIÓN DE HIPOTECAS Y PRECIOS DE VIVIENDA.

En este sentido, reiteró que los ritmos de crecimiento del crédito de las familias y de los precios de la vivienda se están moderando "suave pero continuadamente" en los últimos trimestres, lo que favorecerá el proceso de "ordenada normalización" del mercado inmobiliario y, por tanto, "se minimizará la probabilidad de escenarios menos favorables".

Concretamente, señaló que si bien la financiación captada por los hogares ha comenzado a mostrar síntomas de desaceleración en estos últimos meses, mantiene todavía tasas de crecimiento anual elevadas, en el entorno del 18%, aunque menores que en los meses precedentes en línea con el endurecimiento de la política monetaria.

En este sentido, indicó que en 2006 la deuda total de las familias alcanzó los 832.000 millones de euros, pero sus activos se situaron en 1,75 billones de euros, lo que indica que la riqueza de los hogares es siete veces el PIB español y su deuda supone sólo el 58% de la riqueza nacional. Además, agregó que el 70% de los españoles no tiene hipotecas.

LA SUBIDA DE TIPOS FAVORECERÁ EL AHORRO.

A su vez, subrayó que este "ajuste moderado" de los tipos de interés, al elevar la remuneración del ahorro, propiciará una recuperación de la tasa de ahorro de las familias, que ha mantenido una clara tendencia descendente en los últimos años.

Del mismo modo, también cabe esperar, según Fernández Ordóñez, que la subida de tipos suponga una moderación del gasto en inversión residencial de los hogares, que lleve al sector inmobiliario hacia ritmos de expansión "más moderados", aunque precisó que es previsible el mantenimiento de un "dinamismo considerable" dado el crecimiento demográfico, la inmigración y el propio aumento del PIB.

En paralelo a esta desaceleración de los créditos hipotecarios, el gobernador mencionó que se está observando un incremento de los créditos al consumo, que están creciendo a ritmos superiores al 17%, y añadió que es cierto que España parte de tasas muy bajas en comparación con la zona euro, pero que el Banco de España tiene intención de vigilar su evolución.

EL CREDITO A EMPRESAS SIGUE FUERTE.

En el caso de las empresas, afirmó que el incremento de los tipos de interés no ha tenido aún "un efecto apreciable", ya que los recursos financieros captados por el sector están creciendo a un ritmo del 24%, debido al dinamismo de la inversión en bienes de equipo y a que las compañías españolas están desempeñando un "elevado protagonismo" en procesos de adquisición y fusión empresariales."Sus ratios de endeudamiento están aumentando y la carga financiera asociada incidirá sobre sus resultados", advirtió.

A pesar de este marco "favorable", Fernández Ordóñez admitió que la subida de tipos de interés puede perjudicar especialmente a las familias con mayores niveles de endeudamiento en relación con su renta, aunque indicó que la reciente rebaja del IRPF podrá "aliviar parcialmente" este efecto al incrementar la renta disponible en los segmentos de población "potencialmente más afectados" por los mayores costes financieros.