VALENCIA, 9 Abr. (EUROPA PRESS) -
El vicepresidente tercero de la Generalitat y conseller de Medio Ambiente, Agua, Urbanismo y Vivienda, Juan Cotino, anunció hoy que el Gobierno valenciano hará un llamamiento a toda la sociedad valenciana para que se manifieste en contra del acuerdo propuesto por Castilla La Mancha de establecer una reserva hídrica en su Estatuto e impedir así el trasvase Tajo-Segura.
Cotino, que se expresó en estos términos en un comunicado, explicó que en la próxima cumbre que se celebre entre los presidentes de la Comunitat Valenciana y Murcia, Francisco Camps y Ramón Luis Valcárcel, respectivamente, y en la que también participarán la Federación de Regantes de la Comunitat Valenciana y el Sindicato Central de Regantes del Acueducto Tajo-Segura, se acordará la fecha de la manifestación para exigir que "desaparezca cualquier tipo de traba que ponga en peligro el trasvase de las aguas del Tajo".
Según comentó el vicepresidente del Ejecutivo valenciano, "el acuerdo propuesto por los socialistas para el Estatuto de Castilla-La Mancha perjudica no sólo a la Comunitat Valenciana y la Región de Murcia, sino también al conjunto de España".
Por ello, desde la Generalitat pedirán "la mayor participación posible de la sociedad, de los alcaldes, concejales, empresarios, y de todos los ciudadanos que quieran defender aquello que en justicia nos corresponde", con el objetivo de que "se escuche alto y claro que no queremos reservas ni restricciones al trasvase Tajo-Segura y que vamos a seguir reivindicando la llegada de las aguas tanto del Tajo como del Ebro".
Tal y como aseveró Cotino, "el Gobierno valenciano estará siempre con los regantes y apoyará siempre las necesidades de agua de la Comunitat Valenciana, tal y como manifestó ayer mismo el presidente Camps durante una reunión con regantes".
Juan Cotino indicó que la reserva de los caudales propuesta en el Estatuto de Castilla-La Mancha "perjudicaría directamente al Júcar, lo que supondría restricciones a los regantes y a más de dos millones de habitantes de Valencia y su área metropolitana", puesto que el 75 por ciento del agua que se consume en esta zona "procede del Júcar ye se vería afectado por la reserva".
"Por tanto, desde el Gobierno valenciano pedimos al conjunto de la sociedad que se manifieste públicamente en contra de acuerdos que van claramente en perjuicio de los valencianos", recalcó.
Por último, el vicepresidente indicó que la idea de trasvasar agua entre cuencas "no pertenece exclusivamente al PP, sino que es una necesidad que se ha manifestado a lo largo de la historia en España para cubrir las carencias hídricas de las zonas deficitarias y que, tal y como se desprende del documento presentado ayer, ya durante la II República fue diseñado un trasvase de aguas del Ebro por un gobierno socialista", concluyó.
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