ETA.- Un acusado desconocía que en su local hubiera explosivos porque estaban "debajo del lavadero"

Aitor García Justo
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Actualizado: jueves, 26 mayo 2011 14:05

El fiscal pide 2 años de cárcel para un presunto miembro de un talde que cometía actos de 'kale borroka' en San Sebastián

MADRID, 26 May. (EUROPA PRESS) -

Un acusado de guardar explosivos en un local que estaba a disposición de la Asociación Cultural 'Herria', a la que pertenecía, ha mantenido en la Audiencia Nacional que desconocía la existencia de este material porque se hallaba "fuera del alcance visual" del público, escondido "en falsos techos o debajo de lavadero".

Ante la Sección Tercera de la Sala de lo Penal, Aitor García Justo ha afirmado que "nunca" presenció que hubiera materiales explosivos en esta taberna, a la que podían acceder "50 o 60 personas" y en donde tan sólo estaban a la vista unos cohetes habitualmente lanzados en las fiestas populares. "No era visualmente perceptible que estaban manipulados, tan sólo se daría cuente un delincuente", ha dicho su abogada.

García Justo, para quien el fiscal ha elevado a definitiva su petición de dos años de cárcel por un delito de depósito de sustancias inflamables y explosivos, ha explicado que el centro cultural organizaba tamborradas, coros y excursiones al monte y que el establecimiento se encontraba bastante "desordenado". El representante del Ministerio Público mantiene que este local guardaba publicaciones y propaganda de ETA.

El acusado también ha asegurado que no hubiera "consentido" el escondite de estos aparatos explosivos y ha añadido que dejó de participar como vocal en la Junta Directiva de la asociación en enero de 1999, cuando le "salió un trabajo en un bar que no le permitía ejercer sus funciones" en el órgano directivo. Su abogada ha pedido su absolución al entender que los miembros de la Junta no son "garantes" de las actividades realizadas por otros socios.

Durante la vista oral, un perito ha puesto de relieve la incautación en este establecimiento varios cohetes susceptibles a ser utilizados en acciones de violencia callejera. Según el fiscal, García Justo integraba un talde que cometía actos de 'kale borroka' en San Sebastián desde 1996 hasta su desarticulación el 14 de mayo de 2000.

El fiscal Luis Barroso considera que el grupo se coordinaba para perpetrar actuaciones de violencia callejera en apoyo de la banda terrorista ETA y, entre otras acciones, atacaba con líquido inflamable instalaciones de Correos, teléfono y juzgados, quemaba autobuses y cajeros bancarios, realizaba pintadas a favor del reagrupamiento de presos y lanzaba piedras a edificios públicos.

Después de realizar acciones dirigidas a "crear en la población situaciones de terror", los miembros del 'talde Y' se reunían en un local de la Asociación Cultural 'Herria', donde guardaban publicaciones y propaganda de ETA.

ABSUELTOS LOS OTROS MIEMBROS DEL TALDE

El resto de los presuntos integrantes del talde, un total de 14 personas, fueron juzgados el pasado mes de noviembre y absueltos en enero por falta de pruebas. En esta causa estaba procesado García Justo quien no pudo asistir al juicio al estar encarcelado en ese momento en Francia.

Durante la vista oral el presidente del tribunal, Alfonso Guevara, protagonizó un incidente a gritos con el abogado 'abertzale' Zigor Reizabal, al que pidió investigar después de que éste abandonara la sala de vistas alegando que él y sus compañeros no habían preparado el procedimiento porque habían alcanzado una conformidad con el fiscal que finalmente no llegó a producirse.

García Justo nació en Hernani (Guipúzcoa) el 5 de septiembre de 1974 y fue detenido el 9 de mayo de 2003 por la Policía Judicial francesa, en una operación desarrollada de forma conjunta con los servicios de información de la Policía española. El arresto se produjo en la localidad de Saintes, a unos 90 kilómetros de Burdeos, donde fue localizado junto a la considerada jefa de comandos Ainhoa García Montero.

Con anterioridad fue detenido junto con su hermano Asier por agentes de la Policía Nacional el 2 de mayo de 1995 en su domicilio de San Sebastián, acusado de pertenecer a grupos de apoyo a ETA denominados "taldes Y", encargados de realizar actos de sabotaje. El juez de la Audiencia Nacional Ismael Moreno decretó su ingresó en prisión incondicional.

Aitor volvió a ser detenido por agentes de la Ertzaintza, acusado de ser uno de los autores de la quema de la sede del PSE en Alza (San Sebastián), el 26 de septiembre de 1998, una acción por la que quedó absuelto.