MADRID, 16 Oct. (EUROPA PRESS) -
Los documentos incautados durante la operación dirigida por el juez de la Audiencia Nacional Baltasar Garzón para acabar con los intentos de reconstituir Batasuna muestran que la organización terrorista ETA se mostró "preocupada" porque la izquierda abertzale se presentara a las pasadas elecciones europeas junto a la plataforma Iniciativa Internacionalista-La Solidaridad de los Pueblos y dejó muy claro que su "prioridad" hubiera sido acudir con Eusko Alkartasuna.
Así se desprende del auto por el que el magistrado envía a prisión a Arnaldo Otegi, Rafael Díez Usabiaga y otros tres dirigentes de la izquierda abertzale por un delito de integración en organización terrorista. En concreto, se basa en un documento incautado durante la detención de Ainara Oiz y que constituye "una misiva dirigida por ETA" al 'Bateragune', en el que queda claro que ETA asume una "única" dirección "en lo político y lo militar", según el magistrado.
En el texto, los responsables de la banda terrorista evalúan positivamente las iniciativas desarrolladas por el 'Bateragune' respecto a la celebración unitaria del 'Aberri Eguna' en abril de 2009 y la convocatoria de la huelga general de mayo de 2009, pero evalúa "muy negativamente" la decisión adoptada respecto a las elecciones al Parlamenteo Europeo.
En concreto, ETA califica de "procedimiento inadecuado" la elección de la lista encabezada por Alfonso Sastre y se muestra "preocupada" porque se tomara esa decisión, ya que en el "debate" con el "Área de Dirección de Batasuna" sobre este asunto, la decisión que se tomó en fue "clara".
Además, incide en que en las "actas" de las asambleas de militancia de base de la izquierda abertzale había pocas opiniones "favorables" a la opción de II-SS. "Estando así las cosas, no entendemos de ninguna manera el que se haya tomado esa decisión", aseguran.
En la misiva, dejan claro además que su "prioridad" era la opción de Eusko Alkartasuna, y lamentan que finalmente "no pudo salir". Ante esta situación, ETA hubiera preferido la abstención o la integración en la candidatura Euskal Herriaren Alde, que se promovió en la circunscripción del Estado francés.
Los responsables de ETA subrayan que la opción de EA "estaba diseñada dentro de una dirección clara" y pregunta a los integrantes del Bateragune si han "trabajado en esa dirección" y si han "explicado a Hostoa la propuesta tan bien como era necesario".
Es decir, explica Garzón, los integrantes de la pretendida nueva mesa nacional llevaron a cabo "contactos" con Eusko Alkartasuna, pero "bajo la dirección de ETA", que cuestiona "cómo se ha gestionado esa delegación".
"REPRESIÓN Y ADVERTENCIA" DE ETA A BATASUNA
La opción escogida por la 'Comisión de Coordinación' (nombre con el que también se refieren al 'Bateragune'), lleva a ETA a plantearse "dónde se toman las decisiones" y a advertir que no tienen "la intención de buscar 'el enemigo dentro de la casa'". "Una vez leídas las comunicaciones y las actas se nos hace difícil ver el recorrido para llegar a esa decisión", afirman.
Este documento muestra, según Garzón, la posición "jerárquicamente superior" de ETA respecto al 'Bateragune', con el que la banda llega "hasta la represión y la advertencia" por los "errores" cometidos. De esta manera, para el magistrado, se evidencia la existencia de una "'línea política' única para toda la izquierda abertzale y una 'dirección' que se encarga de controlar su desarrollo".
Es decir, según el juez, "sólo puede concluirse que los contactos impulsados y desarrollados por la 'Comisión de Dirección' de la izquierda abertzale con los agentes políticos y sociales soberanistas no son una iniciativa autónoma e independiente, sino que responden a una directriz previa de ETA".
ETA, "ENORMEMENTE IRRITADA"
La dirección "única" que asume ETA "en lo político y lo militar", continúa el auto, también se evidencia en el capítulo del documento dedicado al "proceso de reflexión de la izquierda abertzale", en el que los responsables de la banda le trasladan al 'Comité de Dirección' que su diseño del "proceso democrático" puede ser debatido, aunque hay "muchos puntos de vista que no son compartidos por la Organización".
"Nos irrita enormemente que se siga debatiendo un modelo de proceso que no es compartido por la organización", advierten los etarras, que piden a los coordinadores de la izquierda abertzale que "recompongan" el debate después del verano, porque su último informe "no puede ser el de la estrategia de cara al futuro".
Sus advertencias van más allá, ya que llegan a avisar de que "los diseños profundos y concretos del Proceso Democrático los concreta ETA y ETA con la responsabilidad de la Izquierda Abertzale" y dejan claro que "todo lo demás pueden ser diseños de los Procesos Democráticos sin ETA, no los de ETA".
"La izquierda abertzale, sus responsables y las estructuras no se tienen que meter en los altos niveles de definición del Proceso Democrático, no les corresponde a ellos y, además, no es la prioridad de este momento", remachan.
