Recuerdan el documento conjunto en el que piden un final sin impunidad y la condena de toda la historia del terror etarra
MADRID, 16 Dic. (EUROPA PRESS) -
Las víctimas del terrorismo han avisado ya de que no aceptarán un "falso" comunicado de ETA declarando un alto el fuego y en el que sin embargo no anuncie el abandono definitivo de las armas y la condena a la violencia. Por ello, defienden que la única novedad que esperan es una derrota definitiva de la organización terrorista a través de la actuación policial y judicial.
En declaraciones a Europa Press, diferentes asociaciones y colectivos de víctimas se han mostrado escépticos sobre la posibilidad de que ETA emita en los próximos días una declaración de tregua y han augurado que, en caso de que haga público algún comunicado, será una declaración "de paja" sin consecuencias reales.
Por ello, han insistido en la necesidad de continuar con la labor judicial y policial en la lucha antiterrorista y no estar pendientes de los pasos "falsos" que dé la banda. "Es una vergüenza que un país entero esté pendiente de un comunicado de unos asesinos", ha defendido la presidenta de la Asociación de Víctimas del Terrorismo, Ángeles Pedraza.
Las víctimas animan así a no entrar en el juego de ETA y recuerdan el documento de bases que firmaron la práctica totalidad de asociaciones y colectivos plasmando sus exigencias sobre las condiciones en las que debe basarse un eventual final del terrorismo, que gira en torno al principio de una derrota de ETA "sin impunidad" y la exigencia a sus miembros de que condenen toda la historia del terror de la organización terrorista.
PEDIR PERDÓN PUERTA POR PUERTA
El presidente de Dignidad y Justicia, Daniel Portero, ha coincidido en esta idea y ha defendido que los terroristas deben "entregar las armas y ponerse a disposición policial y judicial para cumplir por sus crímenes". Además, ha hecho hincapié en la necesidad de que los etarras pidan perdón a sus víctimas. "Tienen que ir por cada una de las puertas de las casas de las víctimas a pedir perdón y cumplir sus penas", ha defendido Portero.
A su juicio, la banda intentará "tensar la cuerda al máximo" para facilitar la participación de la denominada 'izquierda abertzale' en los próximos comicios autonómicos y municipales. Sin embargo, ha advertido de que se tratará de "un nuevo engaño" porque "va a parecer que desaparecen pero no van a agachar la cabeza". "La única forma de poner fin a ETA es a través de su derrota policial y judicial", ha explicado.
En el mismo sentido, Pedraza ha asegurado no estar pendiente de los comunicados de la organización terrorista y ha dicho que el único comunicado que le interesa es uno del Gobierno dejando claro que no dejará a los terroristas estar presente en las instituciones y anunciando la derrota de ETA.
En la misma idea han coincidido la directora de la Fundación Miguel Ángel Blanco, Cristina Cuesta, y la presidenta de la Fundación Gregorio Ordóñez, Ana Iríbar, que han rechazado valorar posibles futuros pasos de la banda y se han remitido al manifiesto conjunto de las asociaciones de víctimas.
EVITAR CAER EN SU JUEGO SEMÁNTICO
En él, las víctimas exigen que en el final de ETA "se evite caer en el juego semántico" de la banda y Batasuna, "siempre plagado de palabras torticeras, tacticismos malintencionados y dobles sentidos para engañar", además de defender que la reprobación de la historia de la organización terrorista "es una exigencia y condición democrática básica". "Lo primero que se debe exigir a ETA, a Batasuna y al entramado político de ETA es la condena de la historia de terror de ETA", sostiene el documento.
Siguiendo en esta línea, aborda la política penitenciaria que se aplica sobre el colectivo de presos etarras y defiende que ésta no debe considerarse como "un instrumento de futura utilización para equivaler a políticas de gracia". "Una política penitenciaria que llegara a basarse en la excarcelación anticipada de presos juzgados y sentenciados, enmascarándolo en una aplicación laxa de la progresión de grados, supondría una forma de impunidad", avisan las víctimas.
