El etarra Errazkin admite que hizo de "enlace" entre liberados y legales de la banda y se desmarca de la bomba en Lezkao

Actualizado: martes, 6 noviembre 2018 12:25

MADRID, 6 Nov. (EUROPA PRESS) -

El etarra Ugaitz Errazkin Tellería ha reconocido este martes ante la Sección Segunda de la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional que hizo de "enlace" entre liberados y legales de la banda terrorista ETA a instancias del Joanes Larretxea, autor junto a Beinat Aguinagalde del asesinato del empresario vasco Ignacio Uría en 2008 e integrante del comando Ezuste.

Ha negado, no obstante, que tuviera algo que ver con el atentado contra la sede del PSE de Lazakao (Guipúzcoa) en la madrugada del 23 de febrero de 2009 por el que ya fueron condenados el propio Aguinagalde y Manex Castro Zabaleta, miembros del mismo comando y al que presuntamente, él también pertenecía.

Errazkin Tellería ha respondido a preguntas de la Fiscalía y su defensa en esta primera sesión del juicio, que previsiblemente se prolongará hasta el jueves. El Ministerio Público pide para él 15 años de cárcel por el delito de estragos terroristas a resultas del daño ocasionado con la bomba contra aquella sede -que no dejó heridos--, más otros 8 años de cárcel por pertenencia a organización terrorista, delito del que aún no ha respondido en España.

Según ha explicado el acusado, que fue entregado por Francia en abril tras cumplir 7 años tras el hallazgo de sus huellas en los explosivos descubiertos en un zulo de ETA, su relación con la banda terrorista comenzó a "finales de 2008", cuando recibió una carta que no estaba firmada pero en la que reconoció la letra de Joanes Larretxea, quien le "proponía una cita" a la que asistió.

Allí, el miembro del comando Ezuste le dijo "que necesitaban una figura que hiciera de enlace entre los liberados y los legales", le preguntó si le "parecía bien" desempeñar ese papel y él aceptó. Pese a ello, ha asegurado que no tenía conocimiento de las acciones que desplegaban los legales y los liberados de ETA, dado que "no" le informaban de los movimientos y nunca le pidieron que tomase parte en una acción armada o como lanzadera.

Con Joanes Larretxea, conforme ha apuntado, "tenía relación", lo que en su opinión explica que el ADN del condenado por matar a Uría apareciese en el coche propiedad de su madre y no que este hubiera sido el medio utilizado como lanzadera. "Nos reuníamos y en alguna ocasión pudo estar en el coche porque llovía, o yo qué sé, y nos pudimos meter en el coche", ha apuntado.

"COMPRÉ UNA MOCHILA"

Su papel, según lo que ha declarado, era desempeñar "en alguna ocasión algún trabjo, coo ir a decathlon a comprar una mochila". "En algunas ocasiones se me dijo de comprar comida, ropa...", ha apuntado Errazkin Tellería, para incidir en que nunca tuvo "ningún contacto" con explosivos o armas, ni para preparar la bomba que destrozó la Casa del Pueblo en Lezkao ni para limpiar los restos que dejaron sus compañeros al montarla.

Entre ellos estaba Aguinagalde, el otro terrorista de ETA condenado por el asesinato de Uría y sentenciado asimismo por aquella bomba de 2009 en la sede socialista de Lezkao. Errazking ha dicho que le conocía "desde pequeños"; igual que a Manex Castro, en cuyo piso se fabricó la bomba y en el que, según ha dicho,"nunca estuvo" manipulando explosivos.

El propio Aguinagalde ha apoyado su versión compareciendo como testigo de la defensa. Tras reconocer que participó en aquel atentado pues está condenado en firme por esos hechos, ha señalado que no recordaba ni cómo era la mochila que se utilizó ni quién conducía la furgoneta en la que él trasladaba el explosivo. Sí ha dicho recordar que Errazkin Tellería no tuvo nada que ver con ninguno de estos aspectos: "No ayudó a nada en la realización de la acción".

En concreto, ha argumentado a preguntas de la defensa y la Fiscalía que "por una cuestión de estructura" y de "funcionamiento", Errazkin Tellería ni tuvo ni pudo tener participación en el atentado porque su papel, era mantener "lo más estancos" posibles a los grupos de liberados y legales de ETA: Él era el enlace entre ambas facciones y la persona a través de la cual se "minimizaba el contacto" y se "maximizaba el intercambio de información".

DIEZ KILOS DE NITRATO DE AMONIO Y ALUMINIO EN UNA MOCHILA

La Fiscalía sostiene que Errazkin Telleria, Aguinagalde y Castro confeccionaron entre el 22 y el 23 de febrero de 2009, de "común concierto", un artefacto explosivo compuesto por "entre ocho y diez kilos de nitrato de amonio y aluminio y un multiplicador de alto explosivo (nitrometano)", en un piso de Hernani (Guipúzcoa), cuyos propietarios eran los padres de este último.

Sostiene que una vez preparado el explosivo, el acusado se valió de una furgoneta de la marca Mercedes para poner en marcha su plan y después de llegar a la sede socialista, "mientras dos de ellos permanecían en el vehículo, el tercero colocó una mochila marca Umbro en cuyo interior estaba el artefacto explosivo ya citado, junto a la pared del edificio", que quedó destrozado.