Ex vicepresidenta balear dice que reunión entre PP y UM iba dirigida a que ayuntamientos no pusieran "obstáculos" al PTM

Actualizado: martes, 13 abril 2010 18:04

Cabrer se desvincula de las negociaciones del PTM y afirma que su departamento emitió un informe sobre el "carácter irregular o anómalo de las ART"

PALMA DE MALLORCA, 13 Abr. (EUROPA PRESS) -

La eurodiputada del PP y ex vicepresidenta del Govern balear, Rosa Estaràs, subrayó hoy en calidad de testigo ante el juez que la reunión a la que asistió en noviembre de 2003 entre miembros del PP y UM, y a la que según dijo acudió en nombre del entonces presidente del Govern balear, Jaume Matas, iba dirigida a que los Ayuntamientos gobernados por ambas formaciones políticas "no pusieran obstáculos" al desarrollo del Plan Territorial de Mallorca (PTM).

Así lo puso de manifiesto en una comparecencia de quince minutos ante el titular del juzgado de Instrucción número 6, Miquel Florit, el fiscal Juan Carrau y varios abogados personados en el caso que investiga la presunta trama de corrupción urdida en torno al PTM y que, a través de la figura de las ART -que permitían acometer recalificaciones de determinados terrenos, revalorizando su valor, bajo el pretexto de preservar otras zonas de Mallorca- habría generado 'pelotazos' (plusvalías) por valor de unos 300 millones de euros.

Según incidió, el encuentro, que tuvo lugar en el Parlament balear, se celebró para hablar del pacto de gobernabilidad que había sido rubricado entre PP y UM en las elecciones autonómicas y municipales de ese año, y en él se abordó de forma "general" la negociación del PTM. Sin embargo, recordó al respecto que "no se entró en detalles" como tampoco se habló de ninguna ART en concreto "ni se mencionó ninguna con carácter específico".

Al ser inquirida por el fiscal Juan Carrau sobre el contenido de la reunión, la testigo afirmó que se estableció que el Plan era competencia del Consell de Mallorca (gobernado por UM), institución que haría la propuesta, y se determinó que los Ayuntamientos del PP "intentarían poner las menores pegas posibles", tal y como reveló. En este contexto, el PP encargó a su entonces conseller de Medio Ambiente, Jaume Font, que coordinara los Ayuntamientos 'populares', agregó Estaràs, quien señaló que en aquel acto no se entregó ningún borrador del PTM al Govern.

Fuentes jurídicas señalaron además a Europa Press que Estaràs afirmó haber participado en la reunión en nombre de Matas. Se da la circunstancia de que ya ayer el ex vicepresidente del Consell, Miquel Nadal, quien también depuso como testigo, manifestó que en su caso recibió de la entonces presidenta del Parlament balear, Maria Antònia Munar, el encargo de convocar a una reunión a miembros de PP y UM de Govern y Consell, encuentro que según las investigaciones sirvió para perfilar aspectos decisivos del PTM.

Es más, recordó en este contexto que Matas y Munar "comían juntos cada 15 días", insinuando que en estos encuentros pudieran abordarse cuestiones relacionadas con el Plan y ambos dirigentes estuvieran detrás de las negociaciones.

En su breve declaración, la ex vicepresidenta recalcó que fue un encuentro "con carácter general" tras el cual no asistió a posteriores reuniones de este tipo. Cabe recordar que en mayo de 2008 la ex presidenta del PP balear negó haber participado en reuniones en las que se hubieran decidido aspectos relevantes de la norma urbanística. Unas declaraciones que entonces efectuó después de que el testigo Josep Antoni Giménez le involucrase en el encuentro celebrado en la Cámara autonómica.

A su salida de los juzgados, Estaràs eludió hacer declaraciones a los medios, al aseverar que debía apresurarse por coger un avión. Tras la comparecencia de Estaràs también declararon como testigos la diputada autonómica del PP y ex consellera de Obras Públicas, Mabel Cabrer, y el ex secretario técnico del Consell de Mallorca, Miquel Ramis.

CABRER SE DESVINCULA DE LAS NEGOCIACIONES

Por su parte, Cabrer se desvinculó de las negociaciones llevadas a cabo de cara a la aprobación de la norma urbanística, y negó haber asistido a la reunión celebrada en el Parlament, en contra de lo manifestado ayer ante el magistrado por Massot, el ex vicepresidente insular Miquel Nadal y el ex director de Urbanismo Miquel Àngel Grimalt. En este sentido, apuntó que en función de su cargo sabía que se estaba gestando el PTM y que de ello el encargado era el Consell.

Sí recordó que una vez aprobado el texto su departamento, en concreto Massot, emitió un informe que ponía de manifiesto el "carácter irregular o anómalo de las ART directas por falta de justificación", y en el que se mencionaba la necesidad de redactar un decreto a fin de regular estas áreas, pese a que "no se llegó a materializar nada en concreto".

La parlamentaria, a preguntas de los abogados, no recordó haber participado en ninguna reunión sobre estas figuras urbanísticas, y apuntó finalmente que en el pacto de gobernabilidad la competencia de Urbanismo era de UM, por lo que no le consta que se reservara la competencia del PTM al PP.

A su salida de la sala de vistas, tras aproximadamente una hora de declaración, Cabrer aseveró ante los medios congregados que nunca ha mantenido "ningún tipo de relación con promotores ni ayuntamientos", ya que la tramitación del PTM "no era un área del Govern, como tampoco las ART".

Sí apuntó al ex conseller de Medio Ambiente y actual portavoz insular del PP, Jaume Font, y a la ex vicepresidenta del Govern, Rosa Estaràs, como los interlocutores de la formación 'popular' que asistían a las reuniones mantenidas con UM en virtud del pacto de gobernabilidad rubricado en 2003 entre ambas formaciones.

LA EX CONSELLERA NIEGA "IRREGULARIDADES"

Al mismo tiempo, preguntada por la presunta trama de corrupción urdida con la aprobación del PTM a través de las ART, que generaron 'pelotazos' urbanísticos por valor de 297 millones de euros al revalorizarse los terrenos incluidos en estas áreas, Cabrer aseguró "no tener constancia de ninguna irregularidad".

En concreto, el juez investiga si pudieron delitos de tráfico de influencias, información privilegiada y prevaricación por parte del anterior equipo de gobierno del Consell, dirigido por UM con el apoyo del PP, mediante la filtración de información privilegiada para beneficiar a importantes promotores de la isla mediante la recalificación de terrenos de su propiedad previamente acordados en las reuniones que habrían mantenido PP y UM.