Figar no ve racismo o xenofobia tras los disturbios de Alcorcón, sino "un problema de orden público y de delincuencia"

Actualizado: lunes, 29 enero 2007 15:02

MADRID, 29 Ene. (EUROPA PRESS) -

La consejera de Inmigración de la Comunidad de Madrid, Lucía Figar, opinó hoy que los disturbios juveniles registrados recientemente en Alcorcón no responden a "un brote racista, a un problema de xenofobia en el municipio, sino básicamente a un problema de orden público y de delincuencia", algo que en gran parte "se soluciona si hay mayor presencia policial en las calles", dijo en declaraciones a Europa Press.

Así, advirtió que en dicha localidad ha habido jóvenes "de todo tipo, inmigrantes y españoles", que "durante varios días y en jornadas consecutivas" han respondido a distintas convocatorias armados en algunos casos "con instrumentos violentos, con puñales, con pistolas, etcétera" y que, por ejemplo, en el caso de anteayer, "se dedicaron a agredir a la policía".

Por ello, defendió la necesidad de que la región reciba más efectivos policiales. "La Comunidad de Madrid lleva desde el inicio de la legislatura diciendo que es objetivamente necesaria una mayor presencia policial en las calles. Ha aumentado muchísimo la población, de cinco a seis millones de habitantes, y venimos demandando 3.000 policías y guardias civiles más, que fue además el compromiso del propio presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero, y no han llegado", aseguró.

La titular de Inmigración del Ejecutivo de Esperanza Aguirre dijo que en el ámbito social "ya se están haciendo cosas". "Nosotros hemos multiplicado por cuatro nuestro aporte, nuestra ayuda, para proyectos sociales en el marco de la juventud, de jóvenes inmigrantes, etcétera, en estos años. Ahí estamos actuando y lo que falta un poco es que a los delincuentes se les combata con la Ley y el Estado de Derecho", concluyó Figar.