El fiscal rebaja a 32 años la petición de cárcel para dos 'grapos' que asaltaron un banco en 2006 hiriendo al director

Europa Press Nacional
Actualizado: viernes, 31 octubre 2008 16:20

MADRID 31 Oct. (EUROPA PRESS) -

El fiscal de la Audiencia Nacional Vicente González Mota rebajó hoy de 35 a 32 años su petición de pena para cada uno de los dos 'grapos' Israel Clemente y Jorge García a los que el Ministerio Público acusa de llevar a cabo un asalto en marzo de 2006 a una entidad bancaria de Castellón y provocar heridas al director de la sucursal.

La Fiscalía les considera autores de los delitos de homicidio terrorista en grado de tentativa (17 años de cárcel), aunque ofreció al tribunal la alternativa de considerar los hechos como un delito de terrorismo con resultado de lesiones, penado también con 17 años de prisión, según el artículo 572.2 del Código Penal.

También les considera autores del delito de detención ilegal (12 de prisión) y del de robo en grado de tentativa (3 años). González Mota reduce así este último delito a la mitad al considerarlo en grado de tentativa y no consumado como consideraba inicialmente.

En su turno de última palabra, Israel Clemente aseguró que "lo único que espera es una sentencia larga", dado que reafirmó su pertenencia "a un grupo antifascista". Por su parte, García dijo que "no es una cuestión política acabar con la vida del director de una sucursal" y añadió que "si hubiera tenido a un director de un banco a tiro, lo hubiera matado".

Ya en la primera sesión de este juicio celebrado ayer, los dos integrantes de los GRAPO justificaron el asalto a la sucursal argumentando que pretendían obtener "una parte de la riqueza que la gran banca roba a este país".

Durante la vista, los dos acusados reconocieron los hechos, que se produjeron a las 7.40 horas del 16 de marzo de 2006, y los justificaron con el objetivo de "recaudar fondos para llevar a cabo la lucha armada", según apuntó García.

"Queríamos una parte de la riqueza que la gran banca roba a este país, pero no teníamos plan preconcebido para atentar contra este señor", justificó Clemente. Por ello la defensas de los dos acusados pidieron una condena de 11 años y nueve mes por los delitos de lesiones y de robo.

"NO ERA UN OBJETIVO"

Ambos señalaron que el director, José Gil Lliveros, no era "un objetivo militar" de la organización y que durante el asalto le plantearon que, si colaboraba con ellos, no sufriría ningún daño. Sin embargo, admitieron haber realizado tres disparos, uno "intimidatorio" para que éste no huyera que impactó en una puerta y dos que le hirieron en un hombro y un glúteo.

"No queríamos poner en riesgo su vida", aseguró García antes de añadir que su condición de "socorrista de la Cruz Roja" le permite saber "dónde es necesario disparar para herir a una persona y dónde una herida no es mortal".

También ayer compareció el director de la entidad, que relató cómo en el momento en que se produjeron los hechos un comunicante que se presentó como 'La Abuela' telefoneó a la sucursal para hablar con los asaltantes, con uno de los cuales mantuvo una conversación.

Los acusados reconocieron, a preguntas de sus abogados, la mayoría de los hechos contenidos en el escrito de calificación del fiscal, que detalla que, una vez en el banco, Clemente y García conminaron al director a abrir la caja fuerte. No obstante, éste desconocía la combinación, motivo por el cual los dos acusados decidieron retenerle hasta la llegada de otro empleado.

Cuando el trabajador llegó, el director le alertó del atraco y salió huyendo, momento que los dos acusados aprovecharon para realizar los disparos. Éstos le causaron lesiones de pronóstico reservado que, si no afectaron a órganos vitales, eran "potencialmente peligrosas por su trayectoria y naturaleza".

Contenido patrocinado