La fiscal rebaja un año su petición de pena para dos de los GRAPO acusados de atracar 68.725 euros en un supermercado

Actualizado: viernes, 6 octubre 2006 19:22

MADRID, 6 Oct. (EUROPA PRESS) -

La fiscal de la Audiencia Nacional Blanca Rodríguez rebajó hoy su petición de pena para dos de los miembros del GRAPO acusados de atracar un supermercado en la localidad cántabra de Maliaño en noviembre de 2001, Jesús Merino del Viejo y Santiago Francisco Rodríguez Muñoz. El Ministerio Público presentó hoy su informe de conclusiones, en el que solicitó que la Sección Primera de lo Penal les condenase a 23 años de prisión, y no a los 24 que pedía en su escrito de acusación.

El juicio por estos hechos contra ellos y contra sus compañeras Mónica Refojos Pérez y Josefa Baños Andujar, que comenzó ayer, quedó hoy visto para sentencia, después de que compareciesen diversos agentes, quienes ratificaron los informes periciales que elaboraron sobre los acusados.

Los procesados se negaron ayer a responder a las preguntas que les dirigió la fiscal, llegando Merino a espetar al tribunal que no iba a "participar en esta farsa fascista". La representante del Ministerio Público pidió al tribunal que condenase a 23 años de prisión a éste y a Rodríguez Muñoz, a los que considera autores de un delito de pertenencia a banda armada, robo con intimidación terrorista y atentado contra los agentes de la autoridad.

Para Refojos y Baños, por su parte, solicita 17 años de cárcel al entender que son responsables de un delito de pertenencia a banda armada y robo con intimidación terrorista.

Los testigos que declararon en el juicio relataron, al igual que sostiene el escrito de la fiscal, cómo cuatro personas entraron en el supermercado, al que anteriormente habían acudido en diversas ocasiones para estudiar los movimientos de los furgones de la empresa de seguridad que recaudaban el dinero.

Según la fiscal, estas cuatro personas son Merino del Viejo, Refojos, Baños y su compañera del GRAPO Gemma Belén Rodríguez Miguel, quien no está siendo juzgada porque cumple condena en una prisión francesa. El otro acusado, Santiago Francisco Rodríguez, les esperaba en un coche fuera del supermercado para propiciar su huida.

Una vez dentro del supermercado, los miembros de los GRAPO abordaron, con sus armas en las manos, a los vigilantes de seguridad que acababan de recoger la recaudación de la caja central y se apoderaron de más de 68.725,41 euros. Los acusados, según los testigos, encañonaron a los guardias de seguridad, a quienes quitaron sus revólveres y les obligaron, junto con el resto de personas, a echarse al suelo.

TIROTEO CON LA GUARDIA CIVIL

Tras huir del lugar, los acusados fueron sorprendidos por unos agentes de la Guardia Civil cuando estaban introduciendo el dinero en el maletero de un vehículo. Los agentes les dieron el alto, pero los acusados lograron huir disparando contra ellos. Uno de ellos fue herido de levedad por el ataque.

Cuando los acusados ya habían logrado fugarse, los agentes hallaron una mochila que contenía un artefacto explosivo simulado, abandonado por los procesados, según la fiscal, para crear confusión y facilitar su fuga. En su vehículo encontraron, además, varias bolsas que contenían un teléfono móvil, que fue analizado por la Policía, una foto de Mónica Refojos, diversos documentos manuscritos, así como una olla que contenía otro artefacto explosivo simulado.