El Gobierno espera que la renovación del TC se produzca antes de terminar el año

Actualizado: jueves, 9 diciembre 2010 21:21

Un senador 'popular' reprocha que se abandonase la reforma de la Constitución y Jáuregui le recuerda que no hay consenso para ello

MADRID, 9 Dic. (EUROPA PRESS) -

El ministro de la Presidencia, Ramón Jáuregui, espera que la renovación del Tribunal Constitucional (TC) "pueda producirse antes de finalizar el año" y confía en que el Congreso de los Diputados proceda "con diligencia" como lo ha hecho este mes el Senado, según ha dicho en una comparecencia ante la Comisión Constitucional de la Cámara Alta.

El propio Jáuregui dijo recientemente en una entrevista con Europa Press que confía en que antes del día 14 de diciembre haya una propuesta de consenso entre los dos grandes partidos sobre los cuatro candidatos que elegirá el Congreso para el Alto Tribunal.

El ministro ha recordado también a los senadores que a partir de enero los grupos parlamentarios deberán ponerse de acuerdo también para renovar a los miembros del Tribunal de Cuentas, sin olvidar al Defensor del Pueblo, cuyo anterior titular vio terminado su mandato en junio y desde entonces ejerce en funciones su número dos.

Así, ha admitido que Gobierno y grupos parlamentarios deben procurar que la renovación de los órganos constitucionales se haga "con mayor consenso y diligencia" que el demostrado hasta ahora. Una parte de la renovación del TC, el tercio de corresponde al Senado, está pendiente desde hace tres años.

De hecho, el senador del PSC Isidre Molas, que ha intervenido por parte de la Entesa Catalana de Progrès (PSC-ERC-ICV) ha deseado que no se produzca la misma demora con el Tribunal de Cuentas y ha subrayado que "las vacantes deben ser cubiertas cuando se producen". Molas ha señalado que, aunque hay distintas vías legales para intentar resolver este problema "hondo", "las leyes no lo resuelven todo" si no hay voluntad política de los grupos para proceder a los nombramientos.

La de este jueves ha sido la primera comparecencia en la Comisión Constitucional del Senado del nuevo ministro de Presidencia y en ella Jáuregui ha recibido el reproche del senador 'popular' Joan Huguet por haber abandonado el Gobierno la reforma de la Constitución después de haber pedido un informe al Consejo de Estado sobre cuatro puntos concretos (reforma del Senado, enumeración de las autonomías, inclusión de proceso de integración en Europa e igualdad de hombre y mujer para heredar la Corona).

HUGUET: "NO HAY QUE TENER MIEDO A ADAPTAR LA CONSTITUCIÓN"

"Traigan una propuesta y la discutiremos con voluntad de diálogo y de consenso", ha declarado Huguet, que ha subrayado ante el ministro que "la Constitución tiene que servir a los intereses de los españoles, pero no hay que tener miedo a adaptarla a la realidad de hoy".

El senador balear ha preguntado no sólo por la reforma global de la Carta Magna sino además por si el Ejecutivo prevé alguna reforma puntual del Senado para convertirla en Cámara territorial --como inicialmente quería el Gobierno socialista-- con medidas como que esta Cámara tenga la última palabra en las reformas de los Estatutos de autonomía.

En su réplica, Jáuregui le ha recordado que fue el PP quien no quiso una reforma de la Carta Magna --"Dos no se entienden si uno no quiere y nosotros tenemos la convicción de que ustedes no quieren"-- aunque también ha admitido que la reforma constitucional no es una prioridad en una legislatura marcada por la crisis económica.

De hecho, se ha mostrado convencido de que el PP no se mostraría "precisamente elogioso" si mañana el Gobierno aprobase sin más un proyecto de reforma constitucional y lo llevase a las Cortes. Es más, ha subrayado que no se puede presentar un proyecto de esa envergadura sin tener en cuenta el clima político, y no sólo entre los dos grandes partidos, sino entre todos los que dieron su visto bueno a la Constitución.

Según Jáuregui, aunque se plantee una reforma constitucional sobre cuatro únicos puntos, el Gobierno tiene que tener en cuenta de antemano cuáles otros pueden surgir --"no es seguro que todos los grupos acepten sólo cuatro"-- y dónde se puede llegar. "Salvo que seas un irresponsable, no se puede abordar sin saber adónde vas", ha recalcado, antes de subrayar que cualquier reforma constitucional debería hacerse con, al menos, el mismo apoyo que tuvo la de 1978.

JÁUREGUI: "MANTENGAMOS EL OBJETIVO DE LA REFORMA"

Así, ha emplazado a todos a admitir que, en un momento en que la "vertebración política y partidaria brilla por su ausencia", no es posible una reforma de la Constitución. "Mantengámoslo como objetivo y busquemos espacios y tiempos", ha añadido.

El ministro ha admitido que las reformas constitucionales "deberían ser más normales" en la práctica política española pero ha dejado claro que no admitía el reproche del PP por abandonar ese proyecto, teniendo en cuenta que está siendo imposible cualquier consenso entre socialistas y 'populares'.

En su última intervención, no obstante, Huguet ha matizado que no estaba reclamando del Gobierno una propuesta de reforma, sino que el informe del Consejo de Estado se remitiese al Senado para crear una ponencia de estudio.

Jáuregui sí ha dejado abierta la puerta a otras reformas "posibilistas" del Senado, que requerirían reformas sólo reglamentarias y ha explicado que ya ha hablado con la Junta de Portavoces de la posibilidad de que algunas leyes empiecen o terminen su tramitación parlamentaria en esta cámara.

El ministro ha respondido también a las críticas del senador Alfredo Belda (CC) por la supresión del derecho de voto a los emigrantes en las elecciones municipales y lo ha justificado en que esta medida no es "privarles" de un derecho a los emigrantes, sino "reforzar el sentido del voto" de los vecinos de una localidad evitando que la participación de gente que no vive en ella distorsione los resultados.