Gobierno vasco garantiza a los empresarios que "no cejará" hasta que quienes les "amenazan", acaben en la cárcel

Actualizado: lunes, 23 noviembre 2009 19:10

Aguirre dice que la crisis "está tocando fondo" en Euskadi, pero advierte del drama de tasas de paro "superiores a las acostumbradas"

BILBAO, 23 Nov. (EUROPA PRESS) -

El consejero de Economía y Hacienda del Gobierno vasco, Carlos Aguirre, aseguró hoy a los empresarios vascos, en nombre del lehendakari, Patxi López, que el Ejecutivo autónomo "no cejará" hasta que quienes les "amenazan", acaben en la cárcel. Por otra parte, indicó que la crisis "está tocando fondo" en Euskadi, aunque advirtió del "drama" de tasas de paro "superiores a las acostumbradas".

Durante su intervención ante una amplia representación empresarial, política e institucional, con motivo del VII Encuentro Anual de la Cámara de Comercio de Bilbao, Agirre, que sustituyó al lehendakari en la presidencia del acto por encontrarse éste convaleciente de una enfermedad, elogió el papel de la Confederación Empresarial de Vizcaya (Cebek), que esta tarde será distinguida con uno de los premios de la institución mercantil.

Según dijo, la patronal vizcaína, "una organización ya centenaria" supone "todo un ejemplo de implicación en el desarrollo de Vizcaya y de Euskadi", así como "un motor de su crecimiento económico" y una referencia "de firmeza y entereza en el combate contra el terrorismo".

"Muchos de los aquí presentes conocéis de primera mano la amenaza de ETA. Quiero deciros que contáis con el apoyo del Gobierno vasco en esta batalla y que no vamos a cejar en nuestro empeño hasta acabar con todos ellos en la cárcel", advirtió.

Además, se mostró convencido de que "la crisis ha metido a todos en el mismo saco", por lo que "todos deben remar juntos" para "salir de ella, trabajadores, sindicatos y Administraciones". "Participar y apoyar en la búsqueda de soluciones" para afrontar la crisis se ha convertido en "una cuestión de responsabilidad social, de solidaridad interna", agregó.

Tras afirmar que la recesión constituye "el problema más acuciante de la ciudadanía", indicó que "quien quiera erigirse como representante de los intereses de la sociedad, no puede quedarse al margen" o cometerá "un acto de imprudencia".

"No me refiero únicamente a la obligación moral que tienen todos los agentes sociales de participar en la mesa de diálogo. Estoy hablando de una cuestión clave, la corresponsabilidad", agregó.

Según Aguirre, para el Ejecutivo vasco las empresas son "un elemento clave" para el progreso de Euskadi, por lo que, en su opinión, "ayudar a su desarrollo es algo que compete a todos".

"EL PARO, UNA LOSA"

El consejero vasco de Economía recordó que, durante el último año, Euskadi ha debido enfrentarse a una situación económica "difícil", de forma que en el tercer trimestre del año, el PIB cayó un 4 por ciento interanual, y el 3,9 por ciento en el territorio vizcaíno. "Euskadi no se ha quedado fuera de este terremoto que ha sacudido el mundo entero, porque no existía la más mínima posibilidad de que pudiera hacerlo", precisó.

Tras realizar un repaso a las medidas puestas en marcha, admitió que estas iniciativas, por sí solas, no harán que el País Vasco "salga de la crisis", pero sí "ayudan a paliar sus efectos" y a "vislumbrar el final de este prolongado temblor". "Un temblor que, poco a poco, se va calmando", dijo.

Según Aguirre, lo datos más recientes han ofrecido ya signos "alentadores" sobre la crisis en los diferentes países, también en Euskadi, con "señales de recuperación". De esta forma, defendió que el descenso del 0,1 por ciento intertrimestral del PIB en Euskadi, supone una mejora del 0,9 por ciento sobre el trimestre precedente, "y marca una clara inflexión en la crisis".

"La economía vasca ha continuado suavizando la intensidad de la crisis y, a partir de ahora, iniciamos una lenta senda de recuperación, que se consolidará a lo largo de 2010, pero que será, posiblemente, de baja intensidad, con una baja creación de empleo", señaló.

Para el consejero, será preciso mantener el estímulo fiscal y la actuación de las administraciones públicas "para corregir los efectos perversos de la crisis".

Además, recomendó "asumir" que en un futuro próximo se registrarán unas tasas de paro "superiores a las acostumbradas", lo que supondrá "un drama para muchas familias" además de "un lastre para el crecimiento de nuestra economía". Según Aguirre, el Gobierno vasco es "consciente" de "esta losa", motivo por el que trabaja en la protección del empleo actual, la recuperación de los perdidos y la creación de "los necesarios".

El responsable vasco de Economía y Hacienda defendió la existencia de "motivos" para mantener en Euskadi "un prudente optimismo", debido a factores como un desempleo más bajo que la media estatal, un endeudamiento también inferior, que se suma a un tejido empresarial "dinámico" y una "escasa o menor incidencia" en el PIB de sectores como el de la Construcción.

"Estamos tocando fondo y hay que ir ahora preparándose para situar Euskadi en la mejor situación de salida posible para cuando este seísmo se acabe", puntualizó.

Aguirre recomendó "aprovechar" las nuevas oportunidades, que no residirán "en el precio" de los productos, sino en su "valor añadido". A su juicio, la innovación surge, en este marco, "como una necesidad imperiosa", por lo que el Ejecutivo ha hecho un "esfuerzo inversor en I+D+i", plasmado en una dotación del 9 por ciento más sobre las de 2009.

Por otra parte, apostó por desarrollar el campo de la internacionalización, "que ahora cobra un redoblado valor", mediante la apertura de las empresas a los mercados externos. En este "mundo cada vez más global", Aguirre consideró que ya no es suficiente la fórmula I+D+i, sino que se debe considerar la "3i+D, investigación, innovación, internacionalización y desarrollo". "En estas tres 'i' está metido el futuro del país y la llave para posicionar Euskadi en el mundo", aseguró.

CÁMARA DE COMERCIO

Por su parte, el presidente de la Cámara de Comercio Bilbao, Ignacio María Echeberria, que dio inicio al acto, recordó la trayectoria de la institución, fundada en 1886 con más de 70.000 empresas asociadas y que ofrece diferentes servicios a 41.000 compañías y usuarios.

Echeberria se refirió también a la crisis económica y al sistema financiero mundial que "ha permitido salvar" la intervención del Estado. Tras recordar que en España "pueden ser convenientes" movimientos de concentración entre entidades financieras que "conduzcan a unidades con mayor capacidad de resistencia e inversión", puntualizó que la situación de estas entidades en Euskadi "parece muy buena", lo que supone "una ventaja para la economía cercana".

Pese a admitir una recuperación de la recesión en el ámbito internacional, aseguró que en Euskadi, debido a su dependencia de la economía española, no será "suficiente para superar la crisis". Además, quiso dejar claro que "un planteamiento serio, tendente al sostenimiento del sistema financiero y a facilitar la salida de la crisis, es fundamental para la recuperación de la confianza".

Por ello, se mostró convencido de que "el ritmo de retirada de las ayudas públicas al sector financiero" será "de suma importancia" para que "la confianza se vaya afianzando".

Echeberria defendió la figura del empresario, cuya figura "no puede despacharse con la simpleza de evocar las figuras del capitalista desalmado o el especulador cortoplacista". Además, se refirió a la situación de la violencia en relación al colectivo empresarial, cuya superación sería "la mejor inversión que podríamos hacer como país", no sólo desde la dimensión económica, sino también desde la "sociológica y ética".

Tras agradecer a quienes "han intentado esta superación, desde el esfuerzo y el desgaste institucional que comporta", defendió que la paz "es mucho más que un orden". "Es -señaló- el deseo permanente y condición para que la dignidad de toda persona pueda ejercerse. De ahí que no podemos renunciar a ella".