Asegura que el PSN "no recibió órdenes" porque se reflexionó "conjuntamente" y rechaza participar en un gobierno de UPN
MADRID, 8 Ago. (EUROPA PRESS) -
La secretaria de Política Autonómica y Relaciones Institucionales del PSOE, Carmen Hermosín, admitió hoy que no se puede pedir a los miembros del PSN que se muestren "contentos" con la investidura de Miguel Sanz (UPN) como presidente de Navarra porque están "muy dolidos y heridos" con la política "de confrontación" del anterior Ejecutivo navarro.
En declaraciones a Onda Cero recogidas por Europa Press, Hermosín explicó que el PSN está "muy molesto" por la actitud "desleal" de UPN "queriendo deslegitimar cualquier política" socialista. "En el PSN están muy enfadados y muy disgustados con la actitud de UPN, porque además se ha demostrado que lo que decía respecto a la actitud del PSOE era falso y mentira", subrayó.
Así, recordó que el partido liderado por Miguel Sanz es el que tiene la "responsabilidad" de buscar la gobernabilidad en Navarra por haber sido el más votado en las últimas elecciones autonómicas, pero destacó que no se puede pedir a los socialistas navarros "que estén contentos" por su investidura."Recuerden la manifestación de UPN contra el Gobierno y los socialistas, ¿cómo querían que les apoyásemos?", argumentó.
PSN TENÍA CIERTA AUTONOMÍA
Además, rechazó la posibilidad de escisión en el seno del PSN y explicó que sus miembros sabían que tenían "cierta autonomía" para "explorar" posibles acuerdos pero que los pactos serían decididos por los órganos federales. Hermosín indicó que su decisión será "acatada" por los socialistas navarros "aunque a algunos no les guste", y reconoció que algunos sectores del PSN tenían "expectativas" de un gobierno con Nafarroa Bai.
En este sentido, la responsable de Política Autonómica socialista aseguró que el PSN "no recibió órdenes", sino que se reflexionó "conjuntamente" para tomar una decisión y los socialistas navarros "sabían perfectamente desde el primer día" que la Ejecutiva Federal no aceptaría "determinados gobiernos".
Hermosín defendió que en esta "nueva etapa" UPN no puede mantener la misma posición que en la anterior legislatura y les emplazó a estar "más abiertos al diálogo, intentar la convivencia y no abrir la brecha" para no convertirse en un elemento de "distorsión, discusión y confrontación".
ALENTAR LOS NACIONALISMOS
Según defendió, "se ha demostrado" que las acusaciones de UPN hacia los socialistas sobre Navarra "eran mentira" y señaló que este tema fue "probablemente" uno de los elementos que rompió el proceso de negociación entre el Gobierno y ETA. Además, acusó a "la derecha" de alentar las posturas nacionalistas con su "radicalismo".
Por su último, preguntada por la opción de que el PSN ocupe una consejería en el Gobierno Foral, rechazó esta posibilidad y subrayó que los votantes colocaron con sus votos a los socialistas "en el ejercicio de una oposición útil". "No veo la conveniencia de formar parte del un gobierno de UPN, ellos tienen la responsabilidad de formar gobierno en minoría", concluyó.
