Jordi Sevilla ve una "chapuza" el acuerdo para celebrar plenos en enero y julio y apoya la reforma constitucional

Europa Press Nacional
Actualizado: lunes, 29 marzo 2010 20:58

MADRID 29 Mar. (EUROPA PRESS) -

El ex ministro Jordi Sevilla considera "una chapuza" el acuerdo adoptado por unanimidad en el Congreso para celebrar sesiones plenarias en los meses de julio y enero, que la Constitución de 1978 dejó fuera de los periodos ordinarios de actividad parlamentaria. Sevilla se decanta por la reforma constitucional limitada que planteó sin éxito el presidente de la Cámara, José Bono.

Sevilla relata en su página personal, en un artículos recogido por Europa Press, que cuando era presidente de la Comisión de Cambio Climatico intentó en tres ocasiones celebrar sesiones en dichos meses e incluso consiguió el acuerdo unánime de los grupos parlamentarios, pero fue la Mesa del Congreso, presidida por Bono, quien no le dejó. "Me agrada que ahora hayan cambiado las cosas", señala.

En cualquier caso, cree que con el nuevo acuerdo tampoco se podrán celebrar sesiones de la comisión "porque no es cierto que enero y julio sean meses normales desde el punto de vista parlamentario". "La Constitución establece los períodos de sesiones parlamentarias excluyendo enero, julio y agosto, pues en esos meses funciona una Diputación Permanente que se reúne y puede convocar sesiones plenarias extraordinarias --relata--. Y lo ha hecho muchas veces. Cambiar eso exigía una pequeña reforma constitucional, fácil y rápida de hacer, según los informes de los servicios jurídicos del Congreso".

A su juicio, los grupos parlamentarios se han negado a esa reforma constitucional limitada que proponía Bono y al final "se ha acordado dejarlo todo como está". "Como algo había que hacer ante la crítica sobre el exceso de vacaciones aparentes de los diputados, se ha acordado dejarlo todo como está --proclama--. Es decir, después de rechazar todas las soluciones, se ha improvisado una chapuza que se quiere hacer pasar por la gran solución. Y todo ello, pese al empeño, empuje e imaginación del presidente Bono y del hecho de que todos estaban de acuerdo en hacerlo".

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